"El planteamiento del Ministerio de Energía de rebajar el ámbito de vigencia del servicio de interrumpibilidad de doce a cinco meses va a ser transitorio. A partir de junio entrará en vigor un nuevo mecanismo estable, que no inmutable, que garantizará el futuro de las grandes industrias", señaló ayer el Consejero de Industria, Isaac Pola, al término de una reunión con Daniel Navia, el Secretario de Estado de Energía. En junio de 2018 se pondrá en marcha "un mecanismo diferente de compensaciones" que, según Pola, se basa en ideas defendidas desde antiguo por el Principado: la rebaja del precio de energía no sólo tiene que venir por la interrumpibilidad -el pago con dinero de la posibilidad de que el ente regulador corte la corriente de las compañías-. "Se pondrán en marcha mecanismos vía tributos y peajes. La próxima subasta llegará hasta mayo para que haya tiempo de desarrollar el nuevo proceso", apuntó el consejero asturiano.

Isaac Pola y Daniel Navia se reunieron ayer por la mañana en Madrid acuciados por la publicación del borrador de una orden ministerial que dejaba en casi nada los bonos eléctricos que son cruciales para el sostenimiento de la producción de empresas tan importantes como Arcelor, Alcoa y Asturiana de Zinc. "Lo que nos ha trasladado es tranquilidad al respecto del futuro de las empresas que dependen de un precio bajo de la energía eléctrica", añadió el consejero Pola. "El próximo mes de diciembre se convocará una subasta con un período de cinco meses. Posteriormente, es decir, en junio, se pondrá en marcha el nuevo mecanismo".

Las subastas anuales del servicio de interrumpilidad se pusieron en marcha en 2014 con mucha polémica (las grandes empresas y los sindicatos mayoritarios señalaron siempre que el sector no puede planificar de año en año, de ahí que causara sorpresa e indignación que el Gobierno nacional propusiera para el próximo año un período aún más corto de lo acostumbrado). Pola y Navia hablaron de la razón de este cambio: ponerse al día con directivas emanadas por la Comisión Europea. "El proyecto está avanzado, pero no está terminado, de ahí la necesidad de habilitar estos primeros cinco meses", recalcó Pola. "El objetivo de todos es lograr un precio competititivo de la energía con el fin de poder competir en igualdad de condiciones en el mercado", explicó el consejero.

La Comisión Nacional del Mercado y de la Competencia (CNMC) redactó un borrador de orden ministerial para cambiar las reglas de un juego que se había mantenido inalterable desde 2014. Este borrador lo envió al Ministerio de Energía. Antes de ayer se hizo público y la mecha se encendió: los sindicatos acusaban al Gobierno de España de plantear un "despropósito" y las empresas consumidoras de energía mostraron su sorpresa ante "la incertidumbre" de lo que pudiera pasar después de mayo (en el borrador no se indica nada). El borrador está ahora en el Consejo Consultivo de la Electricidad (donde están representadas las comunidades autónomas) y el Principado anunció ayer que pensaba presentar alegaciones al borrador. Pola lo recalcó ayer: "Estamos en plazo y lo haremos".

Lo que está por ver es qué traerá la nueva normativa. El Principado acepta lo que defiende el Ministerio de Energía porque "son medidas que ya habíamos presentado nosotros hace tiempo". La interrumpibilidad, por tanto, tiene los meses contados. A mediados del próximo verano empieza un juego nuevo con reglas diferentes.