Varios trabajadores públicos del Ayuntamiento lamentaron ayer "el grave retraso" en el pago de becas a los empleados con hijos en edad escolar. Según ellos, las concesiones municipales de estas becas afectan "a más de 120 empleados", que una vez iniciado el curso escolar se han visto obligados a adelantar de su propio bolsillo el importe de los libros de texto. "Todo el mundo sabe el dineral que se invierte en libros escolares. No todo el mundo puede afrontar ese gasto, más cuando los beneficiarios de la beca ya han sido anunciados y esperaban ese dinero antes de septiembre", criticaron.

Los trabajadores aseguraron también sentirse "abandonados" por los sindicatos que les representan en la comisión municipal. "Se supone que deben trabajar por nuestros derechos, pero nos dan largas. Estamos pensando en presentar esta queja por registro. Si se nos ha aprobado la concesión de beca es porque andamos muy justos de dinero, no todos podemos afrontar el curso sin estas ayudas", aseguraron.