Los trabajadores auxiliares de Arcelor, un colectivo formado por tres mil personas, iniciaron ayer las movilizaciones que habían anunciado días atrás y que tienen por objeto doblegar a las empresas que, según la denuncia sindical, "aplican de forma interesada el convenio del metal en vez del de montajes". Como consecuencia de esta presunta artimaña, "unos doscientos trabajadores ya han perdido un 20 por ciento de sus remuneraciones".

La "quedada" de ayer, la primera de cuatro programadas en Avilés y Gijón, consistió en una concentración de delegados sindicales de las empresas auxiliares de Arcelor delante de la entrada de la siderúrgica en Trasona para exigir el cumplimiento del convenio colectivo del sector auxiliar.

A la movilización, que cuenta con el respaldo de las federaciones de CC OO de Industria y MCA UGT, también acudieron miembros de comités de las empresas del metal que realizan trabajos de producción y mantenimiento en las fábricas asturianas de Arcelor.