"Volver al Palacio Valdés es como hacerlo a casa". A José María Pou, que es actor, director de escena y gestor cultural, no le van los halagos vanos y, pese a ello, no dudó en reconocer su devoción por el odeón local que celebra estos días el vigésimo quinto aniversario de su reapertura, un hecho que sucedió el 14 de noviembre de 1992. Pou fue uno de los dos invitados estrella, anoche, de la primera sesión de los "Diálogos desde la escena", conversaciones a dúo para dar cuenta de veinticinco años de éxitos y aplausos sobre las tablas.

"Desde este patio de butacas surge una energía distinta que notamos nosotros cuando estamos representando. Lo digo con la mayor sinceridad; hasta me emociono", añadió el actual director artístico de La Latina, el creador de "A cielo abierto", el actor que fue un Sócrates moldeado por las manos de su compañero de diálogo: Mario Gas, la otra mitad de la fiestas. "Lo que habéis logrado en Avilés no se ha conseguido en otros sitios de España", añadió el protagonista de "Largo viaje del día hacia la noche", el director de "Homebody/ Kabul". "Cuando nos dan la lista de los teatros a los que vamos siempre preguntamos: ¿Y para cuándo Avilés?", apostilló Pou.

Unas horas antes, en una rueda de prensa, el propio Pou había insistido en la misma idea: "Este teatro no sólo es un monumento arquitectónico, lo que ayuda muchísimo a la concentración, sino que están los buenos fantasmas de cientos y quizá miles de profesionales del teatro que ayudan a la inspiración. Pero por encima de todo está el equipo que ha llevado el Palacio Valdés durante los últimos 25 años, que coinciden con los últimos 25 años de mi carrera, que han sido los mejores y he tenido la suerte de disfrutarlos muy periódicamente en este teatro", apuntó.

Pero no todo fueron alabanzas. Los dos profesionales -junto al moderador, el profesor Mariano Martín Gordillo- analizaron los cambios desarrollados en la profesión escénica. Martín Gordillo habló de la llegada en 2012 del teatro alternativo, cuando el Palacio Valdés cerró por obras. Gas echó la vista atrás: "No podemos hacer otra cosa que aplaudir aquella idea que tuvieron en el Ministerio de Obras Públicas: recuperar los teatros que sólo eran cines o no eran nada", añadió. "Esa idea agitó las administraciones públicas y también la profesión: existía un parque de teatros por donde mover los espectáculos", continuó. "Pero esto también causó cambios en el otro lado: las compañías se acostumbraron al entramado público, comenzaron a depender de las administraciones públicas y desapareció el productor de compañía", añadió Pou.

Gas explicó que uno de los logros de Avilés es no haber caído en la complacencia "Deberíamos hacérnoslo mirar si no entendemos que el teatro es una forma de altísimo gozo, de alimento del espíritu", apuntó. "Los teatros de este país necesitan más políticos que amen el teatro", disparó. "Los teatros públicos tienen que ser fábricas de una vitalidad inagotable: de la mañana a la noche. Siempre he creído que el teatro público no puede aspirar a hacer lo que el privado ni a la inversa. Los teatros públicos tienen que apoyar la dramaturgia nacional, la recuperación del patrimonio histórico y literario, pero también su puesta al día", añadió el hombre que dirigió el teatro Español, que contribuyó a inventar las Naves del Matadero: hoy Centro de Artes Vivas. "¿Qué era el otro? ¿El de las artes muertas?", se preguntó en clara referencia a la gestión que está llevando Mateo Feijoo sobre las salas más modernas de Madrid.

"Algún día se escribirá la historia del Palacio Valdés y del teatro en Avilés, y el equipo que lo ha llevado ha conseguido algo fantástico a través de la programación de cada temporada: ir creando, educando al público, en el sentido de darle todo tipo de opciones para que vaya conociendo y creando su propio criterio. He venido con espectáculos de enorme riesgo, y de los pocos escenarios que lo quisieron fue Avilés. Es un mérito enorme haber creado un público entendido en teatro", señaló Pou en una de sus intervenciones, ante un aforo que sobrepasó las expectativas. El lunes que viene sigue la fiesta de los diálogos, entonces con Carlos Hipólito y Ana Jelín.