El sector de las auxiliares de Asturias está al rojo. La política de contrataciones de la compañía Arcelor, aseguran los sindicatos, ha caldeado el ambiente. "No queremos volver a los años de la reconversión", apuntan. "Exigimos que nos respeten", añaden. Y es que, según consideran, la tijera de la gran siderúrgica sólo sirve para hacer "contratos baratos" cuyas consecuencias "pagan los trabajadores".

El último episodio de esta película lo protagonizaron los trabajadores de Acciona, que se concentraron ayer por la mañana un par de horas a las puertas de la planta avilesina de la multinacional. Quisieron dejar claro su desacuerdo con la política de despidos llevada a cabo por su empresa como consecuencia, aseguraron los representantes sindicales, "del recorte en los trabajos ordenados por la gran siderúrgica".

Se da la circunstancia de que esta pasada primavera, Arcelor sacó a concurso dos contratos cruciales: el de mantenimiento de las construcciones y el de la obra de Baterías de Gijón. El primero lo explotó durante 40 años la empresa Dragados. Acciona presentó una oferta que Arcelor vio adecuada. Entonces surgió el primer problema: Acciona se tuvo que hacer cargo de la plantilla de Dragados y lo tuvo que hacer porque así se acordó en los años noventa, en los más terribles para un sector que da empleo a más de 3.000 personas. Esta operación -la subrogación- fue alentada, aseguran los sindicatos, por la propia Arcelor. "Ahora tenemos la misma estructura que Dragados, pero facturamos una quinta parte menos que ellos. Acciona, por eso, ha empezado a despedir gente: la semana pasada, tres; esta semana, otros tres y mañana [por hoy] acabamos el tajo de carril que más tarea nos da. Ya nos dijeron que sobraríamos a puñados", subrayó Antonino Gómez de Carvalho, de la USO.

¿Qué ha sucedido? Tanto Comisiones Obreras como la UGT lo tienen claro: "Acciona llegó de nuevas y se encontró con que los trabajadores llevan décadas en sus puestos y que la oferta presentada no daba", aseguraron. El sector auxiliar en Asturias está regulado por la mesa de los Acuerdos de Oviedo y por un convenio que es palpablemente superior que al del metal, el de la construcción o el de transporte. Los trabajadores de las subcontratas tienen convenio propio, pero los recortes en los concursos lanzados por Arcelor traen como novedad aplicaciones de acuerdos reguladores ajenos al de las auxiliares. Esto sembró la alarma hace unas semanas. No se puede hacer el mismo trabajo bajo el amparo de dos convenios contrapuestos, explican los sindicatos.

El sector de las auxiliares está a punto de entrar en ebullición. Todavía no ha estallado, pero los trabajadores están muy quemados. Lo que está sucediendo en Acciona, entienden, es un ejemplo de desconocimiento de un sector tradicional en la economía asturiana. "No puede ser que cinco meses después de haber entrado en Arcelor comiencen con los despidos", apuntan.

La multinacional guarda silencio mientras los trabajadores permanecen con las espadas en alto y advierten de una Navidad "caliente".