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El San Agustín quiere implantar en 2018 un servicio de fisioterapia respiratoria

El área de Rehabilitación atiende a unos 12.400 pacientes anuales y los fisioterapeutas a doscientos al día, el doble que hace unos años

El San Agustín quiere implantar en 2018 un servicio de fisioterapia respiratoria

El área de Rehabilitación del Hospital San Agustín se marca el objetivo de poner en marcha un servicio de fisioterapia respiratoria en 2018. "Hay un montón de pacientes en espera", afirma el jefe del servicio, el doctor Miguel Jiménez Álvarez. La intención es poder realizar el tratamiento previo a la recepción de un trasplante de pulmón, ya que esta es una de las condiciones que pone el Hospital de Valdecilla, el que realiza ese tipo de intervenciones. Otros pacientes que se beneficiarán son los enfermos de EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica) severa. "Aspiramos a conseguir medios humanos y materiales para el año que viene", señala el doctor Jiménez.

El San Agustín cuenta actualmente con cuatro médicos y ocho fisioterapeutas, que tienen más trabajo del que pueden abarcar. "Hay lista de espera", admite el doctor Jiménez. De hecho hay dos distintas. Una, para la primera consulta con el médico, va más rápida: si es urgente no hay espera, si es preferente pasa más o menos un mes y si es de urgencia normal tarda algo más de dos meses. La otra, para recibir tratamiento fisioterapéutico, también es inmediata en casos de postoperatorio, pero otros pacientes tienen que esperar cuatro meses.

"Llevo aquí 27 años. Cuando llegué éramos tres médicos y veíamos mil casos nuevos al año. Ahora somos cuatro médicos y vemos 3.400", señala el jefe del servicio, para poner de manifiesto el aumento de la demanda. "Nosotros vemos al año, además, unas 9.000 revisiones de pacientes", añade. Así que, sumando una cifra y otra, los médicos de Rehabilitación atienden a unos 12.400 pacientes al año. "Es verdad que estamos muy saturados, pero se va haciendo el trabajo. Es mayor problema el área de fisioterapia, a donde vienen diariamente unas 200 personas". Hace dos décadas eran la mitad.

Singularmente, la apertura del nuevo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) supuso un incremento considerable del trabajo en Avilés. Y es que al ser mucho más limitada la capacidad del nuevo servicio de Rehabilitación en Oviedo (que pasó con la mudanza de 90 a 26 camas), remitió a sus áreas sanitarias a muchos pacientes que hasta entonces trataban en el HUCA: fundamentalmente mujeres con secuelas de la operación de cáncer de pecho y niños con problemas neurológicos serios.

Además, desde hace casi dos años se abrió la única unidad de Asturias dedicada a la rehabilitación de suelo pélvico para incontinencias femeninas. La incorporación de estos tres nuevos perfiles de pacientes supone a efectos prácticos el trabajo a tiempo completo de un fisioterapeuta... y un poco más. "Para tener el personal equivalente al que tienen en el resto de hospitales de Asturias tendríamos que tener 11 o 12 fisioterapeutas".

Los pacientes llegan al servicio de rehabilitación derivados tanto de los médicos de cabecera como de los distintos servicios del hospital. De cada 100 pacientes, aproximadamente el 30 por ciento proceden de traumatología, otro 20 por ciento son neurológicos, con daño cerebral (ictus, esclerosis múltiples?) y el 50 por ciento restante es una amalgama de dolores, algias vertebrales, procesos reumáticos, suelo pélvico, linfedema y un pequeño número de niños con lesiones neurológicas.

El servicio de Rehabilitación avilesino tiene algunas singularidades que el doctor Jiménez destaca: es el único servicio de Asturias que está coordinado con Primaria, garantiza la continuidad de tratamientos con los centros de salud, también tiene concertada fisioterapia a domicilio supervisada por los profesionales del San Agustín, es el único que revisa a todos los pacientes de un hospital concertado (el de Avilés), también el único que cuenta con rehabilitación de suelo pélvico? "Y ahora nos queda hacer la fisioterapia respiratoria".

Asegura el doctor Jiménez que el recurso más importante con el que cuenta el servicio son "las manos de los fisios", mucho más eficientes, en su opinión, que los tratamientos con máquina. En cuanto a recursos materiales, prácticamente han permanecido invariables en los últimos 15 años. La joya es la piscina de rehabilitación, "que no es para nadar", aclara el doctor. El agua está caliente, a 32 o 34 grados, y ese calor es útil para relajar y aliviar dolores. Además, la piscina se usa para que pacientes posoperados vayan cargando poco a poco peso en sus extremidades, para ejercicios en brazos y piernas? "Que siga habiendo piscina es un poco milagro. Cuesta mucho, tiene filtraciones, averías? de hecho en muchos hospitales la piscina nunca llegó a utilizarse. Por suerte, los últimos gerentes no nos han preguntado por la piscina", bromea Jiménez.

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