Los vecinos de Manzaneda expresaron ayer su cara más solidaria con un desfile benéfico para recaudar fondos para investigar el síndrome de Kabuki, que afecta a una niña del concejo. Durante el desfile (en la foto) participaron diecinueve niños, que se ataviaron con ropa de una tienda de Candás, dos de Luanco y otras dos de Avilés.