La publicación de las condiciones de la subasta eléctrica, adelantadas ayer por LA NUEVA ESPAÑA, ha puesto de nuevo todas las miradas en Alcoa. Los sindicatos dan ya prácticamente por hecho que las factorías de Avilés y La Coruña se quedarán sin lotes de 90 megavatios (los que más interesan a la firma y de los que solo saldrán ocho a las pujas), arremeten contra la falta de una política industrial y reclaman a la multinacional que apueste por la planta de Avilés. La alcaldesa, Mariví Monteserín, llama a la "calma" hasta que se celebre la subasta: "El partido está por jugar, estaremos muy atentos".

"Este año hay dos paquetes de 90 megavatios menos que el año pasado lo que para nosotros es un ejemplo más de la falta de política industrial que tiene el gobierno del PP. Es inadmisible que año tras año se ponga en riesgo la industria de este país", protestó el presidente del comité de empresa de Alcoa en Avilés, Daniel Cuartas. El ugetista exigió a la compañía "que vaya a la subasta y consiga los megavatios necesarios para la producción de aluminio".

José Manuel Gómez de la Uz (CC OO) se mostró también "muy pesimista". "Este año hay menos potencia a subastar. Si no conseguimos ningún bloque de 90, Alcoa tendrá que ir a por lotes de cinco megavatios. Pero si pasa lo mismo con la planta de La Coruña también va a haber una competencia feroz en los bloques pequeños. Me temo que se puede dar una situación bastante grave. Espero que Alcoa consiga para Avilés al menos la misma potencia que la que estamos utilizando ahora (entre 110 y 115 megavatios). Llevamos diciendo mucho tiempo que si no se adopta medidas van a caer fábricas", incidió De La Uz.

"Tanto Avilés como La Coruña han tenido siempre los valores más bajos de interrumpibilidad de todos los pujantes, no hay excusa técnica para que no sean las primeras en obtener el bloque de 90. Lo contrario sería evidenciar una política de abandono de la planta avilesina por parte de la dirección de Alcoa, así como el uso de los trabajadores para conseguir mayores beneficios que poder repartir en forma de beneficios y de bonus a sus directivos, nunca en invertir en esta planta para garantizar su viabilidad en el presente y el futuro", dijo Sergio Sobrido, de USO. El sindicalista subrayó que "Alcoa España jamás ha dado perdidas y que los resultados del 2017 van a ser mejores que los del 2016". "Los repartos de los bonus de interrumpibilidad y la nueva fórmula que se ha adoptado para calcular el precio de la alúmina son los responsables de que la planta avilesina pueda acabar el año con números negativos", sentenció.

La Alcaldesa pidió cautela hasta que se celebre la subasta, que se desarrollará a partir del lunes en Valladolid. "Queremos un cambio de sistema que estabilice la situación de las empresas y que les dé una perspectiva a medio plazo. Estaremos muy atentos, porque a esta comarca le va mucho en esa subasta", concluyó.