El colegio Sabugo tiene claro que el buen rendimiento escolar depende, en gran parte, de una alimentación en condiciones. Por ello, la Asociación de Madres y Padres (AMPA) acaba de poner en marcha un nuevo proyecto que se desarrollará a lo largo del curso y que pretende concienciar sobre la importancia de la alimentación.

El ciclo ha sido organizado por la presidenta de la asociación, Eva María Álvarez, tecnóloga alimentaria. Ayer, la naturópata especialista en dietética y nutrición Eva Cánovas se encargó de aportar las primeras directrices a los progenitores en una charla titulada "Hay vida más allá del colacao con galletas", en la que desterró algunos mitos muy asentados.

"No todos los niños son iguales, luego no tienen por qué desayunar lo mismo", dijo Cánovas, para quien las dietas de los niños pueden ser versátiles si las sustituciones se hacen respetando los valores nutricionales. "No creo que un buen desayuno deba incluir necesariamente la pauta de un zumo, una galleta y un vaso de leche. Por ejemplo, puede haber niños intolerantes a la lactosa y a veces se abusa de algunos productos lácteos bebibles", aseguró.

Para Eva Cánovas es más idóneo "pensar en un desayuno que incluya proteínas, hidratos de carbono y vitaminas, sin olvidar el aporte de calcio". "Hay una gran variedad de desayunos saludables y sabemos que existe un porcentaje de niños que no desayunan, lo que puede ser perjudicial para su desarrollo: mejor probar alternativas como muesli con frutas o una tostada de pan de masa madre con tomate y jamón serrano, por ejemplo. Y si, como en este último caso, no se toman lácteos, se puede aportar el calcio a media mañana con frutos secos o incorporando alimentos ricos en este mineral a la comida o la cena, como las verduras o el pescado", añadió. "La clave es probar cosas que puedan gustar a nuestros hijos, pero siempre garantizando el equilibrio nutricional necesario", señaló

Asimismo, junto a esta actividad nutricional el AMPA del centro tiene también instalado hasta mañana en un local de la calle López Ocaña un mercadillo navideño con juguetes, ropa y productos artesanales. Lo recaudado se empleará para comprar nuevo material escolar como pizarras digitales, equipamiento deportivo o libros de texto.