La sección de CC OO en Asturiana de Zinc (Azsa) ha hecho público su balance de 2017 y ni la empresa ni el sindicato que tiene la mayoría absoluta de la representación laboral, el Sindicato Independiente de Trabajadores de Asturiana de Zinc (SITAZ), salen bien parados en el análisis. A la compañía, CC OO le reprocha su cicatería, tanta como para negar una reducción de jornada laboral a la plantilla "que supondría apenas un 0,5 por ciento de coste salarial", y eso para una empresa que "se está forrando" como consecuencia del logro de un nuevo récord de producción anual (523.239 toneladas) y del precio al que cotiza en cinc, 3.401 dólares la tonelada, el máximo de los últimos diez años. A SITAZ, lo que le CC OO recrimina es su falta de espíritu combativo, plasmada en la "renuncia" a luchar por conseguir la reducción de jornada o su "conformismo" en materia salarial.

"¿Qué hizo y hace SITAZ al respecto de la reducción de jornada? Abandonarla tan pronto como pudo obedeciendo las órdenes de amo. Perro fiel, devorador de los derechos de todos nosotros, el sindicato independiente. Nunca liderando el SITAZ una negociación colectiva se ha conseguido reducir la jornada en la empresa. Nunca. El amo no quiere. La maquinaria sindical obedece", reza el comunicado que hizo público ayer CC OO a modo de balance del año recién finalizado.

En relación con la mejora salarial lograda en el último convenio, CC OO estima que fue "peor" que la conseguida en al menos 85 empresas de toda España, que tuvieron un promedio de incremento salarial del 5,24 por ciento. "Y eso pese a que la situación de Azsa, con otro récord de producción logrado en 2017 y con el precio del cinc por las nubes, es mucho mejor que la media de la industria; de hecho es extraordinaria", señalan los responsables de CC OO en Azsa.

Desde CC OO se censura el hecho de que el SITAZ "alardee" del convenio pactado cuando, en realidad, supone "mejoras salariales inferiores a las logradas en decenas de empresas entre las que deberíamos figurar dado nuestros buenos resultados". Pensando en 2018, el sindicato minoritario en la fábrica de San Juan da a entender que "todo seguirá igual" dada la costumbre de SITAZ de "decir amén" a lo que quiere la empresa.