Al gobierno local del PSOE ya no le salen las cuentas para aprobar el presupuesto de 2018 de forma ordinaria y sólo un "milagro" impedirá que la alcaldesa, Mariví Monteserín, se tenga que enfrentar a una segunda cuestión de confianza vinculada al documento económico para que la ciudad tenga cuentas este ejercicio. Somos Avilés anunció ayer su negativa a aprobar el plan económico debido a que los socialistas rechazaron las dos propuestas de "mínimos" que la formación morada puso encima de la mesa.

Primitivo Abella, concejal de Somos Avilés, mostró su enfado, ya no tanto por la negativa sino porque el gobierno local "ni siquiera leyó los informes" que realizó su partido para justificar la fijación de un salario mínimo en los contratos de los servicios externalizados y la actualización de las ayudas sociales. "Es una tomadura de pelo", espetó el edil de Somos.

El "no" de esta formación (cinco votos) se suma al que ya anunció el portavoz municipal del PP, Carlos Rodríguez de la Torre, (pendiente de su concreción en la junta gestora del partido) -seis concejales- y al de Izquierda Unida -tres ediles-. Sólo Ciudadanos (una concejala) ha avanzado su intención de apoyar al gobierno local tras alcanzar un principio de acuerdo.

"Lo interesante sería que el PP se abstuviera. Dice que no quiere poner impedimentos al presupuesto y si eso es verdad, que se abstengan y más cuando no tiene otra propuesta de modelo de ciudad", afirmó Raquel Ruiz, concejala de Hacienda.

Respecto a las propuestas de Somos, Ruiz afirmó que lo que plantean "es solo una pequeña parte" de lo que lleva haciendo Servicios Sociales "muchos años". "El compromiso entre la administración públicas y las empresas tiene que ser mayor que lo que plantea Somos. No hay que hablar sólo del precio, sino que generen estabilidad, calidad en el empleo y cuenten con los colectivos más vulnerables para la inserción laboral", apuntó. Primitivo Abella, por su parte, aseguró que lo único que quiere su partido es "sumar más".

Respecto a la propuesta de Somos de compensar la congelación del Iprem, el índice de referencia para la concesión de ayudas, la concejala la rechazó porque "a largo plazo sería insostenible para las arcas municipales". "Cada año aumentamos las ayudas y se hace en función de las necesidades. Lo que plantean es algo insostenible porque la capacidad presupuestaria es la que es. Lo que proponen bien se hace con un recorte de otras partidas bien provocando que los destinatarios reciban menos dinero", afirmó la concejala socialista. Abella, por su parte, criticó al gobierno por no haber analizado los informes que realizó Somos para fundamentar sus propuestas: "Eso mismo lo van a hacer en Castrillón porque es viable, según los técnicos. Aquí prefieren decir todo a no, como siempre", sentenció el concejal de la formación morada.