Un joven de 19 años fue violado por "un hombre de más de cincuenta años" en un piso de Las Vegas, en Corvera. Esto es, al menos, lo que consta en una denuncia que presentó la presunta víctima en la Comisaría de Policía de Avilés hace cuatro meses. Los hechos se produjeron entre marzo y septiembre del pasado año. Según ha sabido este periódico, la víctima de la presunta violación tardó medio año en presentar denuncia al sentirse "coaccionado, asustado y avergonzado". Y es que no había confesado entonces que era homosexual. El presunto autor del delito, cuyo nombre responde a las iniciales E. M. F., niega los hechos. Asegura que lo que hubo relaciones sexuales consentidas.

La víctima cuenta en su denuncia que se bajó una aplicación para su teléfono móvil con el solo deseo de conocer chicos. Rellenó un perfil en el que indicó algunos datos físicos y sus aficiones. Relata también que muy pronto comenzó a recibir contactos de varios usuarios. Atendió una de un chico que decía tener 18 años con el que compartía hobbies. Los primeros contactos fueron vía chat, esto es, diálogos en la propia aplicación. Sigue contando la víctima que el otro chico le propuso quedar para practicar sexo. Asegura el demandante que rechazó esa primera idea porque su intención, en principio, era sólo relacionarse con otros homosexuales. Sin embargo, finalmente, accedió.

Se citaron en un piso de Las Vegas. Llamó a la puerta y le abrió un hombre de más de cincuenta años. La víctima sigue contando que este varón lo cogió del brazo y lo introdujo en el piso, que después cerró con llave. Terminaron en la habitación y, en ese lugar, fue violado por primera vez, según su relato. Se da la circunstancia de que aquella era su primera relación sexual.

Las coacciones, según se puede leer en la denuncia, empezaron a partir de ese momento. Dice el denunciante que su presunto agresor le amenazó con publicar su número de móvil y con hablar con sus padres si no acudía a una nueva cita a su casa. Asegura que encontró a un hombre con un carácter variable, esto es, que unas veces le pedía perdón por lo que había hecho y otras se enfrentaba con él de manera altiva. Y apunta que esta situación le hizo rendirse ante su presunto violador. Es más, asegura que sentía como "una obligación" acompañar al hombre cada día.

Todo estalló de nuevo en septiembre. Dice la víctima en su denuncia que, entonces, el presunto agresor invitó a una tercera persona. Su intención, según la denuncia, era hacer un trío sexual. Según el mismo relato, el otro chico dejó la casa, pero el denunciante, no. Ahí fue cuando, asegura, le violó por segunda vez. La Fiscalía y la acusación particular, dirigida por Ramón Nistal, han reclamado una orden de alejamiento y un informe forense de credibilidad de la víctima para que el juez inicie la instrucción del caso.