La nueva edición del festival Longboard de Salinas de este verano equiparará los premios económicos de hombres y mujeres. Hasta ahora, el campeón masculino se hacía -dependiendo de las inscripciones- con unos 2.000 euros y, la vencedora, con unos 300, según reconoció ayer Pepe Hevia, el organizador: "Estábamos siendo machistas sin saberlo, pero ya hemos abierto los ojos".
El cambio se debe a la polémica alrededor del torneo de surf La Invernal de Cantabria, que recibió críticas por atribuir un premio de 2.000 euros en la categoría masculina y 500 en la femenina. "El problema de nuestros amigos cántabros nos hizo darnos cuenta de que nosotros estábamos haciendo exactamente lo mismo. En la edición de este verano, independientemente de los inscritos e inscritas, los premios serán iguales", aseguró Hevia.
En sus inicios, el Longboard no tenía fondos para premiar económicamente a sus ganadores. "En los últimos seis o siete años el festival se asentó y subió el nivel de los participantes. Nos pareció normal, sin que lo fuese, que al haber más participantes chicos su premio fuese mayor", razonó. "Pero desde que hemos anunciado el cambio se han apuntado cuatro de las diez mejores surfistas del mundo. O sea, que la razón de que hubiese pocas chicas era precisamente porque sus premios eran insignificantes. Lo habíamos entendido al revés", añadió.
El surf nacional, según Hevia, está todavía dando sus primeros pasos. "En California o Australia esta discriminación ya está superada. Aquí vamos por la segunda generación de surferos, así que nos toca aprender a base de cabezazos. Con este, al menos, sabemos que nuestras hijas ya no van a sufrir esta desigualdad", remató el promotor.
