La Policía Local de Avilés registró en la madrugada de ayer ocho incidencias relacionadas con el consumo de alcohol al volante. De ellas, cuatro fueron tipificadas como delito contra la seguridad vial, ya que los conductores triplicaron la tasa de alcohol por miligramo de aire espirado. Salvo una detención por conducción anómala en la calle Ayala, las otras tres se produjeron en un control preventivo situado en la calle Santa Apolonia.

A las 23,05 de la noche de hace dos días se produjo el primer incidente. Las autoridades dieron el alto a un conductor, vecino de Avilés de 42 años y que responde a las siglas de R.P.A., por conducción anómala en la calle Valle de Ayala. Tras realizarle las pruebas, dio 0,92 en la primera y 0,88 en la segunda, miligramos por litro de aire espirado.

En el control preventivo de la calle Santa Apolonia, en dos horas se registraron siete incidencias. Las tres más graves, tipificadas como delito contra la seguridad vial, acontecieron en el margen de una hora. A las 0.58 horas, E.B.F., vecino de Avilés y de 54 años, dio 0,79 y 0,80 miligramos de alcohol por aire espirada. A las 1.15 horas, J.G.G., también de Avilés y de 52 años, alcanzó el 0,80 y el 0,76 miligramos por litros de alcohol espirado. Por último, a las 1.45 horas, A.F.M., también vecino de Avilés y de 48 años, triplicó la tasa de alcohol al dar 0,90 y 0,85 en las dos pruebas.