La idea del arte como fruto de una cadena de montaje preocupa a la Factoría Cultural desde su nacimiento. Y es que el arte es un acto de creación colectivo. Lo volvió a recalcar ayer la concejala de Cultura, Yolanda Alonso, y también cada uno de los responsables de los ocho proyectos becados este año (2.000 euros para cada uno de ellos, la infraestructura del Carbayedo a disposición de cada uno de los creadores, hasta el próximo mes de abril). Hubo teatro, títeres, arte visual, cerámica, serigrafía, danza y hasta títeres. "Este programa de ayudas da sentido al espacio en que nos encontramos", subrayó Alonso. "Nace para apoyar a los creadores y también para acercar al público en general a la creación, algo que ha demostrado varias veces que lo sabe hacer bien", añadió la edil en referencia a las noches Blanca y Negra. "Lo que ofrece este centro son sinergias entre los artistas", concluyó. Una clara fue la que defendió el pintor Roberto Rodríguez: "Voy a experimentar con savias porque me han dicho que hay aquí alguien que lo sabe hacer muy bien", aseguró.
"Bee..! (El rebaño)", se trata de un "proyecto nacional", según declaró la concejala: "Consideramos que era buena idea abrir estas becas a artistas de fuera de Avilés", recalcó. Y aprovechando esta coyuntura tres mujeres presentaron un proyecto de espectáculo de títeres: Ana Laura Barros, Mar Gasco y Mariso García. La primera pertenece a la compañía asturiana "Tras la Puerta Títeres", la segunda, a la madrileña "Hilando Títeres" y la tercera, a "Periferia Teatro", de Murcia. "En las primeras etapas nos hemos visto aquí, en Madrid o en Murcia. Ahora estamos en el proceso de construcción de las piezas", explicó Ana Laura Barros. "Se trata de una niña metida en un sueño en el que "la oveja Morena no quiere saltar la valla".
"Terra Nullius" es el nombre del proyecto de la artista visual Cristina Fernández, un viaje por la geografía y geopolítica a lomos de un carboncillo, mapas de territorios sin estado, "una búsqueda del territorio a través de proyecciones y paisajes", señaló la artista alicantina.
"3D Serie" está a medio camino de "diseño y de la cerámica", explicó Natalia Suárez. La lavianesa aseguró que su intención es "lograr que la tradición se sume a la tecnología". Por eso aplica la impresión 3D a la creación de una vajilla que "serán piezas de una obra mayor". La mayor dificultad que la diseñadora está encontrando "es lograr que las piezas de la vajilla no sean redondas". Lo que busca son lados planos. "Pero las manos son redondas", bromeó.
"Vida" es la que aportan Fernanda Álvarez, Dora Ferrero y Chenky Rodríguez a litografías y serigrafías, que son ámbitos que las tres artistas se mueven como peces en el agua. Las tres trasladan sus inquietudes a formatos tan variados como el papel o la cerámica.
Pintura. Roberto Rodríguez se disculpó con sus compañeros de aventura artística. "No puedo mostrar todavía nada porque voy con retraso", confesó. Rodríguez dijo que su "pintura a veces parece escultura" por las texturas que aprovecha, "sin embargo, no son obras que puedan contemplar desde todos los ángulos". La idea que hila su proyecto es aprovechar, como dijo la concejala, aquello que aporta de más la Factoría, que también es una escuela de cerámica.
"No quiero ser" es el título de la obra Mario Mercurio Martínez. El artista gijonés lo que experimenta es con la animación y la xilografía. "La razón del título es que llevo a cada una de las piezas mis miedos, las cosas que me causan rechazo", explicó el gijonés.
"Sueños de otras vidas" será "una pieza de danza perfomance" que protagonizan Laura Cueto y Rubén Álvarez. "Y dieciséis personas más, que me han regalado su ayuda", confesó la bailarina avilesina.
"Teatro Express" es el título de la idea de Natalia González Blanco: "Traer a Avilés la idea del Microteatro por dinero: obras cortas en distintos espacios", concluyó.
