Los ingenieros industriales destacaron ayer en Avilés la relevancia de su papel "en el desarrollo económico, en la creación de empresas y sobre todo en los avances tecnológicos". "Ahora estamos trabajando intensamente en vincularnos con las tecnologías de la industria 4.0 y la digitalización. Esta profesión siempre ha ido de la mano de la vanguardia tecnológica. Nuestra vocación es la industria, va en nuestro ADN", señaló José Esteban Fernández Rico, decano del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales, en la celebración de la festividad de San José, patrón de estos profesionales.
Durante la celebración, que tuvo como escenario el Palacio de Ferrera, se entregaron las distinciones anuales al ingeniero industrial Ignacio Vallado, fallecido el pasado agosto, y al centro de I+D de Arcelor-Mittal. "Estamos muy agradecidas y emocionadas y también orgullosas por la huella que ha dejado mi padre en el campo de la ingeniería", apuntó Esther Vallado, hija del homenajeado a título póstumo. Su viuda, Margarita Álvarez Canellada, destacó "el gran amor que tenía por su profesión" Vallado. Entre las muchas obras que salieron de su estudio de cálculo se encuentran el Centro de Arte de la Laboral, las "Chaponas" o la rehabilitación del Teatro Palacio Valdés.
El responsable de I+D de Arcelor-Mittal, Nicolás de Abajo, destacó que el reconocimiento llegue en esta ocasión "de compañeros" y se refirió a su relevancia para empresas como la suya. "Necesitamos más científicos e ingenieros a un ritmo que no sabemos si la sociedad va a poder proporcionar. Nosotros tenemos una demanda permanente de técnicos, el lunes se incorporan quince más, y no llegan a cubrirse las necesidades que tenemos en campos concretos, como digitalización y big-data. Hay mucha más demanda que oferta", apuntó el ingeniero.
La celebración de San José se inició con una misa en recuerdo de los colegiados fallecidos durante el último año y tuvo como broche un banquete.
