La Virgen de la Soledad luce desde ayer una medalla conmemorativa y un escapulario de la Orden del Camino de Santiago, que aprovechó la visita del grupo "Peregrinos de Aragón" a la iglesia nueva de Sabugo para condecorar en su presencia a la imagen sacra del templo. Tras el acto, todos los colectivos implicados intercambiaron varios obsequios para, según el comendador de la Orden Carlos Guardado, "consolidar una relación de amistad cada vez más fuerte".

La medalla en cuestión se acuño el pasado 2010, fecha del último Año Jacobeo. "El próximo no tendrá lugar hasta 2021 y en la Orden solo acuñamos la medalla en esos años sacros. Creo que ese dato demuestra la importancia de este gesto y el profundo cariño que la Orden de Santiago profesa por la Virgen de la Soledad", explicó Guardado. La colocación oficial de los dos obsequios se celebró al término de la misa de ayer, que congregó a más de cien feligreses del barrio. La comitiva, después, formó un corro alrededor de la Virgen y entonó para ella el canto de la salve popular.

La cita de ayer en la iglesia de Sabugo fue también especial por contar con la presencia de varios miembros del grupo "Peregrinos de Aragón", que en los últimos días han completado el Camino de San Salvador, la ruta jacobea que va desde la catedral de León hasta la de Oviedo. "Quisimos pasar por Asturias fiándonos del dicho ese que dice que, quien va a Santiago y no a San Salvador, sirve al criado y olvida al Señor. Además, de no haber hecho esta ruta nos habríamos perdido unos paisajes hermosos", aseguró Roberto Iglesias, portavoz del grupo. Como agradecimiento, el peregrino entregó a la parroquia una camiseta de su colectivo y una placa de cerámica a Belén Fernández, hermana mayor de la Cofradía de la Soledad y de la Santa Veracruz. Ésta, por su parte, regaló al grupo visitante una réplica de su Lignum Crucis, la reliquia sacra de la cofradía expuesta desde el pasado septiembre en una de las paredes del templo. Finalizado el intercambio de obsequios y el canto de la Salve, los feligreses disfrutaron también de un concierto de órgano.