La limpieza del camino de Piemonte, que comunica Salinas con San Martín de Laspra, inutilizado desde el pasado 4 de febrero cuando se produjo un argayo, comenzó ayer en la zona de la senda más próxima al desprendimiento de tierra. Hace un mes se acometieron los trabajos de protección de los edificios de la calle Luis Treillard; hasta los patios exteriores de los inmuebles llegaron piedras de gran tamaño y tierra. Para proteger los edificios y a sus residentes, la empresa Asturiana de Zinc (Azsa), propietaria de los terrenos, limpió los patios e instaló unas vallas.

Los argayos se produjeron los días 4 y 9 de febrero. Desde entonces, el camino de Piemonte, de propiedad municipal, permanece cerrado. Los trabajos que comenzaron ayer se prolongarán durante varios días ya que además de la limpieza, los operarios intentarán estabilizar la ladera de Pinos Altos para evitar más desprendimientos.

Además de Azsa, la ladera de Pinos Altos en su vertiente de Salinas tiene otros dos propietarios. Los vecinos y usuarios reclaman a todos ellos que limpien y aseguren la senda peatonal de Piemonte, que es de propiedad municipal y que realicen las intervenciones que sean necesarias para evitar más desprendimientos de tierra. Los vecinos achacan los argayos a la "tala indiscriminada de árboles".

El camino de Piemonte es un tramo de la Senda Norte que discurre desde Salinas hasta Bayas por el litoral castrillonense. Asimismo, el camino es uno de los accesos peatonales al área recreativa de Pinos Altos. Se trata de una senda muy utilizada por caminantes y ciclistas.

Los desprendimientos de tierra en las laderas de Pinos Altos, entre Salinas y Arnao, son habituales desde hace décadas. Los vecinos de Salinas llevan años reclamando una solución definitiva. Algunos estudiosos de la zona sostienen que si se produce un argayo de grandes dimensiones la tierra puede llegar a la playa.