"A los padrinos y madrinas de Avilés se les puede olvidar muchas cosas, pero que no compren el bollo, a día de hoy, es un fallo familiar imperdonable". Así bromeó ayer José Antonio Álvarez, gerente de la Unión de Comerciantes de Avilés y Comarca (UCAYC), en la presentación de "Gastropasión", las tradicionales jornadas de bollos y tapas. Este año, en el evento participarán un total de once confiteros, que venderán sus bollos los días 1 y 2 de abril, y veintiún restaurantes, que servirán tapas diseñadas como homenaje a las cofradías locales entre el 26 y el 31 de marzo. El colofón final de las fiestas del Bollo será el 2 de abril, día de la tradicional Comida en la Calle.

Según Emilio Vidal Conejo y Menéndez, responsables de confitería Vidal y confitería Grao, respectivamente, la clave para incentivar la venta de bollos es innovar en la figura que corona el pastel. "Este año tenemos alguno con personajes de 'La guerra de las Galaxias' o con algún dibujo animado conocido. Es difícil hacerse diferenciar porque la elaboración del bollo en sí es siempre la misma", razonó Menéndez.

En las tapas, sin embargo, el diseño es el factor imprescindible. Es el caso del plato de "Alma Mater", una xarda en salazón con crujiente de tinta de calamar que pretende homenajear a la cofradía de la Soledad y la Santa Veracruz de Sabugo.