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El exboxeador Dacal ofrece su medalla olímpica de bronce al Museo de Avilés

"Hablé con la concejala de Deportes hace meses y me dijo que no me preocupara, pasó el tiempo y ya dudo si interesa", afirma el deportista

Dacal posa en el barrio de La Luz con guantes de boxeo y la medalla de bronce de los Juegos Olímpicos de 1972 que quiere donar al Ayuntamiento. MARA VILLAMUZA

El exboxeador José Enrique Rodríguez Cal, "Dacal", tiene el honor de ser el primer medallista olímpico asturiano desde que se colgó un bronce en los Juegos Olímpicos de Munich de 1972. Guarda aquella medalla con orgullo e incluso le saca brillo de vez en cuando. La tiene en su casa, pero ahora desea donarla al Ayuntamiento con el fin de que sea expuesta en el Museo de Avilés "para que la vean los avilesinos". "Hablé con la concejala de Deportes, Ana Hevia, hace meses y me dijo que no me preocupara, pero pasó tiempo y ya no sé si interesa", señala el candasín que con apenas seis años se trasladó a Avilés, donde reside desde entonces. "Mi intención es que se coloque en un sitio visible", señala el avilesino que practicó boxeo desde los 14 años hasta los 35. Ahora, con 66, participa en carreras atléticas, eso sí, como amateur.

En los Juegos Olímpicos de Munich de 1972 Dacal tenía 20 años. Consiguió el bronce en peso minimosca y se convirtió en el único español en lograr una medalla. "Era impensable, fue una experiencia increíble", relata el vecino de La Luz. Pesaba 48 kilos. "Pesaba lo mismo que mi nieto ahora (Félix González) con diez años, que ya ganó un campeonato de España y un subcampeonato del mundo de pádel", explica, orgulloso de la pasión deportiva de su descendiente.

El que fuera un boxeador técnico y con un golpe de derecha recordado aún entre los aficionados al boxeo tuvo también el honor de ser el abanderado español en los siguientes Juegos, los de Montreal de 1976. "De mi carrera profesional tengo once medallas (seis de torneos como los Juegos del Mediterráneo, los Olímpicos y campeonatos europeos) y otras cinco de otros campeonatos como el Boxam y el de Ciudad de Rimini, en Italia. Pero mi idea es donar la de los Juegos Olímpicos; creo que es importante que la medalla que gané en Munich la vea todo el mundo, fui el primer asturiano en conseguir una medalla olímpica y soy de Avilés, quiero se ponga en el Museo", destaca el exboxeador que tuvo "una alegría enorme" cuando hizo historia en el deporte en 1972.

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