Jesús Álvarez acaba de pasar un mes en una aldea de Ghana colaborando con una ONG segoviana, Sacabocaos, y tiene claro que ha sido una experiencia inolvidable: "Se ven las cosas desde otro prisma. Tienen muy poco, pero son felices. Cuando tienen para comer, para vivir, ya están bien, porque no ambicionan nada más". El corverano estuvo en una aldea de unas 60 cabañas de barro y bambú, que se llama Atsiame. Ahora, ha querido compartir su experiencia a través de una muestra fotográfica que se puede visitar ya en el centro sociocultural de Las Vegas, de lunes a viernes, de 10.00 a 13.00 y de 17.00 a 20.00 horas.

El corverano insiste en lo sorprendente de la vida en la aldea ghanesa. "Cuando volví aquí me encontré con tres desaparecidas en Asturias, lo del niño Gabriel, manifestaciones y solo pude pensar lo bien que se está allí pese a todos los problemas. No es fácil salvar más vidas allí, pero aquí también hay cosas que cambiar", reflexiona.

Viajó junto a otros seis españoles: "Dos estudiantes de Magisterio iban al colegio, que está a un kilómetro, y el resto nos quedábamos en la aldea dando clase a las mujeres para enseñarles escribir en inglés y con los niños más pequeños, de hasta cinco años. Por las tardes, hacíamos talleres, malabares, deportes, para los niños de 7 a 14 años, los que por la mañana estaban en el colegio".

Una de las anécdotas que se trae surgió cuando ayudaban a las mujeres a sacar agua del pozo. "Se reían mucho de nosotros. Un hombre blanco, con kilos y kilos de agua en la cabeza, haciendo un trabajo de mujeres, empapado porque no sabe hacerlo, les hacía mucha gracia", señala. Y es que el agua es uno de los principales problemas. "En el colegio no tenían pozo, los niños se pasaban toda la mañana sin poder acceder al agua. Hemos recaudado fondos y ya están haciendo los sondeos para colocarlo. Seguro que ayuda a que muchos más niños se escolaricen", explica Álvarez.