"Estamos tomando café". Así respondió un agente de policía local a la llamada de un conductor enfadado por la ausencia de agentes para regular el tráfico derivado del cierre de la autovía, por el avance de las obras de acceso al parque empresarial de la ría (PEPA), en concreto, según se deduce de la llamada, en la rotonda de Los Canapés que da acceso a la avenida de Gijón, la conexión de Avilés y la autopista. La conversación ha corrido como la pólvora por los móviles y las redes sociales, por la respuesta (paciente, sosegada e irónica) del agente de policía que atiende el teléfono.

"¿Oye cómo es que no hay nadie aquí en Los Canapés, que está todo desbordado y colapsado?", arranca el hombre, en un tono de voz elevado y dejando entrever su monumental cabreo. "Están colapsando todo el tráfico, no hay dios a pasar", continúa el conductor, que reclamaba agentes para regular el elevado volumen de vehículos, hoy por la mañana. "Entiendo que debería haber alguien aquí", puntualiza.

La respuesta de la Policía Local en un primer momento fue de templar gaitas. Al parecer se produjo un retraso en la apertura de la autovía, prevista para las seis de la mañana, pero que finalmente se retrasó, por lo que se deduce de la conversación, al menos un par de horas. "Todo eso se va a solucionar", intenta tranquilizar el agente al enfadado conductor, en referencia al colapso de la rotonda de Los Canapés. "No tenemos gente en este momento para ir", informa el agente.

"Hostia y para tener gente desayunando sí que tenéis", espeta el hombre, ya en un tono elevado y no ocultando su enfado por la respuesta del agente. "Sí porque los que entran, lo primero que tienen que hacer es tomar café", responde, haciendo gala de su paciencia el policía local, desatando ya por completo las iras de su interlocutor, que informó de que estaba grabando la llamada y su intención fue difundirla.

Disculpas de la Policía Local

Por su parte, la Policía Local de Avilés ha reaccionado rápido a este hecho y ha pedido disculpas públicamente tanto al ciudadano que efectuó la llamada como a la ciudadanía avilesina en general. Consideran que el agente no contestó con el debido tono al teléfono y recalcal que no es excusa el hecho de que todos los efectivos estuviesen ocupados para su no intervención en el atasco que motivó la ya polémica llamada ciudadana.

El hombre que realizó la llamada, por su parte, ha explicado que "no quería montar un pollo" pero asegura que la Policía Local de Avilés tiene un problema del trato al ciudadano.