El exjefe de un hipermercado de Avilés acusado de acosar a una empleada se sentó de nuevo ayer en el banquillo de los juzgados de Avilés, en esta ocasión por haberla agredido presuntamente en la calle el 22 de marzo de 2017. El encausado negó tajantemente los hechos que se le imputan y dijo que la denuncia es una venganza.

La denunciante sostiene que ese día, a primera hora de la mañana, se encontró con su exjefe cuando se dirigía a la sede de la Tesorería de la Seguridad Social. Según su relato el hombre la insultó y la agarró fuertemente por el brazo. Siempre según fuentes próximas al caso, la denunciante aportó un parte de lesiones y un informe forense que recogen que el enrojecimiento que presentaba en el brazo es compatible con los hechos que relata. El acusado, en cambio, negó haberse encontrado con la que fue su empleada aquel 22 de marzo. El fiscal y la acusación particular mantuvieron que el encausado cometió un delito de obstrucción a a la Justicia y un delito leve de agresiones, por los que piden dos años de cárcel, multa y una orden de alejamiento. La defensa pidió la absolución. El caso quedó visto para sentencia.