Chema Iglesias y Juan Rodríguez son "Seven Days" -siete días, en inglés- aunque llevan años y paños en el mundo de la música. Se conocen desde que Iglesias era guitarrista de "Madera rock", allá por el 2002. Pero no fue hasta 2006 cuando se decidieron a montar algo juntos. "Seven Days" es la evolución más rockera y cañera de su proyecto anterior, "Instinto", que duró dos años y ambos "mataron y se murió al mismo tiempo". Por el momento, están grabando en estudio, más concretamente en Ría Records. Su intención es definir cada sonido hasta que el producto sea el deseado.
"Seven Days" son los dos, Iglesias y Rodríguez, pero también cuentan con la colaboración de Senén Fernández, que se encargó de grabar la base rítmica de los tres temas que ya tienen editados: "Díselo a la lluvia", que habla de una relación de pareja; "Ehy, tú", que va de un "bala perdida nocturno"; y "Despertar". El dúo quiere que sus temas tengan una importante base coral. Para ello, cuentan con Sara Méndez, Ivi, Lidia Fernández y Lucía Revuelta.
Chema toca la guitarra con sutileza. Toma su Gibson y la hace hablar. Sus estirados dedos convierten al instrumento de las seis cuerdas en algo mágico. Juan hace lo propio con los teclados, se deja llevar también por la guitarra, una Ibánez, y también es vocalista. Es más, actualmente, compagina "Seven Days" con la orquesta "Grupo Ideas", donde también canta y le da a las teclas del piano.
Ambos músicos son meticulosos, matizan todos los arreglos. Graban en Ría Records, en un estudio pegado a la Quattro, y cuando los temas ya están armados los mezclan en Valencia, en los estudios RPM. "Nos los recomendó Paco Loco y funcionan muy bien", señalan. La economía también influye a la hora de grabar. Tienen siete temas pendientes de masterizar pero aún no los han mandado porque "cuesta dinero".
De aquellos tiempos de "La Clínica" en Versalles, donde ambos empezaron a tontear con las guitarras y otros instrumentos queda el recuerdo y el buen hacer. En 2006, Iglesias y Rodríguez grabaron una "maquetilla" que la guardan con cariño en el disco duro de sus ordenadores. Ahora van "piano piano", tranquilos, y les gustaría salir a tocar pero consideran que el proyecto ha de tener algo que presentar, quizá un disco cuidado que hace de "Seven Days" un proyecto de años.
