"No la vi venir, no la vi venir. ¡Ay Dios mío, qué he hecho!", esas fueron algunas de las palabras que pronunció el joven de 19 años a las personas que presenciaron el accidente que ayer terminó con la vida de María Cándida Carvalho, en la calle Álvarez Gendín, a la altura del número 15, en el barrio de La Magdalena. El conductor, que dio positivo en THC (marihuana) y opiáceos, se mostró "terriblemente" abatido, según comentaron testigos del suceso.

"Es que cuando la quise ver, la tenía encima del coche", alcanzó a balbucear D. E. G., también vecino de Avilés, poco después de las 19.50 horas, cuando se produjo el atropello. Ayer, pasó a disposición policial, aunque finalmente quedó en libertad con cargos, por un delito contra la seguridad vial. No obstante, su situación legal, según comentaron fuentes policiales, estaba ligada a la vida de su víctima, quien falleció en Oviedo, a la hora de ingresar en el HUCA, donde fue traslada en UVI móvil. La investigación por ahora se encuentra abierta y es necesario determinar si la mujer cruzó o no por el paso de cebra que comunica Álvarez Gendín con San José Artesano.

El barrio de La Magdalena amaneció consternado por la noticia, ya que María Cándida era una persona muy conocida y participe de la vida social del barrio. Residía desde hace 30 años en la calle Valdés y Salas. "El drama es tremendo porque era el sostén de su familia", indicó una vecina cercana de la víctima.