El Centro Integrado de Formación Profesional del Deporte Avilés (CIFP), antigua Escuela del Deporte), volverá a impartir el próximo curso la especialidad de técnico deportivo en esquí alpino, que había dejado de ofertar hace cuatro cursos. Con la incorporación de esta especialidad, el centro ubicado en las dependencias del instituto La Magdalena amplía el catálogo de formación. "El turismo activo está proliferando, Asturias cuenta con numerosos espacios naturales y es importante y necesario que la gente esté asesorada por un profesional cualificado", apunta Estefanía Sanz Riestra, directora de la escuela avilesina, que aspira a contar con una sede propia, aún por definir.
"Somos un centro peculiar, único en Asturias y con un gran potencial", señala la docente, para pasar a explicar los distintos itineraros formativos que reúne el CIFP del deporte: Formación Profesional reglada y gratuita de la actividad física (Técnico superior en enseñanza y animación sociodeportiva), enseñanzas deportivas (esquí, media montaña, fútbol, ajedrez, hockey, kárate, surf, tenis, patinaje artístico y danza, fútbol americano y tiro con arco) y cursos de formación para el empleo con los que adquirir certificados de profesionalidad. Precisamente, estos días permanece abierto el plazo de inscripción para desempleados que deseen obtener el certificado de profesionalidad en Fitness acuático e hidrocinesia o en Acondicionamiento físico en grupo con soporte musical.
La Escuela del Deporte, que aspira a ser un referente de formación e innovación en el ámbito de la actividad física y el deporte, destaca por una singularidad: su oferta formativa no es permanente. Este aspecto no cuenta con el beneplácito del profesorado, todos licenciados en educación física. "Reclamamos una oferta estable", indica Emilio Buergo Braña. Este docente, que ensalza el buen ambiente que reina en el centro, la calidad profesional de sus compañeros y la implicación y el elevado nivel de los alumnos, considera que la visión que existe sobre la institución pública es que "está a medio hacer, tiene una oferta volátil, la plantilla de profesores no acaba de fijarse, carece de sede y hay inseguridad en los horarios", subraya. Frente a estos elementos negativos ensalza el carácter pionero de la escuela "que ahora está a la cola a pesar de ser un proyecto político increíble", dice.
Los alumnos que acuden a las dependencias de La Magdalena presentan dos modelos de perfil. Aquellos que cursan el ciclo formativo de Formación Profesional son jóvenes rondando los 18-20 años que proceden de los institutos o colegios; los que se matriculan en las enseñanzas deportivas, por su parte, son adultos veteranos de la actividad física y el deporte, comprometidos con las distintas disciplinas y en su mayoría trabajando, relatan ambos profesores, defensores de la regulación de las profesiones del deporte con el objetivo de acabar con el instrusismo.
Si bien las aulas del instituto de Secundaria acogen en horario de tarde las clases teóricas que corresponden al bloque común de cada actividad, la parte práctica se desarrolla en diferentes espacios, como la piscina del Quirinal, el complejo de La Toba en Llaranes, la estación Valgrande Pajares o la playa de Salinas, entre otros. "Nuestras aulas son la naturaleza", manifiesta Estefanía Sanz, que destaca el apoyo de la Fundación Deportiva Municipal, con la que han establecido un convenio para el uso de sus instalaciones, y también con la estación de Pajares, que recibe al alumnado de esquí y también al matricuado en media montaña.
