Gijón, J. J.

Fernando Tejero cumple tres años al frente de la sección de natación del Grupo Covadonga. Ésta es su segunda etapa como responsable de la natación grupista, en la anterior el club gijonés alcanzó sus más altas cotas. Tejero ha tenido que hacer muchos cambios desde su llegada, pero el trabajo con la base está comenzando a dar sus frutos; benjamines y alevines dominan la Liga asturiana, y los infantiles ya se cuelgan al cuello medallas en campeonatos de España, algo impensable hace poco tiempo.

«Creo que la actuación de los infantiles en el Campeonato de España es positiva, los chicos se han portado bien, aunque en el deporte siempre se pueden hacer las cosas mejor. Con la preparación que han tenido creo que el resultado es suficientemente positivo», considera Tejero al valorar los resultados conseguidos por sus nadadores. Para el técnico «el Grupo tiene un equipo de benjamines y de alevines muy potente y además con mucha gente, con los que estamos logrando buenos resultados, que ellos vean que los que son un poco mayores logran buenos resultados a nivel nacional les anima mucho y hace que sea aún más fuerte el impulso que tienen para trabajar».

El trabajo del cuerpo técnico del Grupo con los más pequeños tiene un doble objetivo, la enseñanza y la competición, «el objetivo es formar pero dentro de la competición. El primer objetivo es la formación, pero la competición es un impulso importante. Tenemos como filosofía que los nadadores se formen como personas y como deportistas a la vez». Estos buenos resultados de los pequeños no tienen reflejo todavía con los equipos mayores, algo lógico si, a juicio de Tejero, la formación de base que tienen no es la mejor, «la formación de base es muy importante a la hora de lograr resultados con los mayores. Los nadadores mayores si no tienen buena su formación inicial es complicado que tengan buenos resultados a nivel alto. Hacemos lo posible para que estén lo más arriba posible y que se mantengan en el deporte el mayor tiempo posible».

Fernando Tejero no quiere valorar lo que se hacía anteriormente en la sección y sólo habla de los tres años en los que él es el responsable. «Creo que ha habido una reforma profunda de la sección, con un mayor control de todos los niveles, creo que el trabajo es muy serio, se hacen continuas evaluaciones del sistema para ver cómo está funcionando». Una de las dificultades de ser el responsable de una sección en el Grupo Covadonga es el tener que compaginar el trabajo de formación en la base, de la competición en los primeros equipos y el ocio de centenares de socios que también hacen uso de las piscinas. Para Tejero, «compaginarlo todo no ha sido tan difícil, porque, afortunadamente, tenemos unas instalaciones que dan para mucho. Personalmente, no he percibido ningún problema en la utilización de las piscinas tanto para el ocio como para entrenar».