Gijón, J. FARRÁS

Las selecciones asturianas cadete e infantil femenina lograron las medallas de plata y bronce, respectivamente, en el Campeonato de España escolar autonómico, que se celebró en Valladolid entre los días 26 y 30 de marzo. El polideportivo Pisuerga acogió la totalidad de los partidos.

La infantil y la cadete masculina no corrieron la misma suerte que las chicas y, a pesar de su esfuerzo, ocuparon las plazas decimoprimera y decimosegunda, respectivamente.

En cuanto a las selecciones femeninas, la cadete se impuso en las semifinales a Castilla y León por un ajustado 2-3 (24-26, 17-25, 25-21, 25-19 y 14-16). En la final, las asturianas cayeron ante Cataluña por 3-1 (18-25, 25-14, 25-14 y 25-14). El tercer puesto fue para Castilla y León, que venció a Madrid (3-0).

Por su parte, la infantil se alzó con la medalla de bronce al imponerse a Galicia por 3-0 (25-18, 25-17 y 25-19). En semifinales cayeron ante Cataluña por 1-3 (19-25, 18-25, 25-17 y 19-25). La selección de Andalucía se proclamó campeona al imponerse en la final a Cataluña por 3-0.

Por otro lado, en cuanto a las selecciones masculinas, la infantil ocupó la decimoprimera posición, derrotando a Castilla y León por 3-0 (25-15, 25-21 y 25-9). Madrid se proclamó campeón al vencer a Andalucía por el resultado de 3-1.

Por su parte, la cadete masculina ocupó la decimosegunda plaza al caer derrotada por Murcia por 3-1 (25-23, 25-22, 20-25 y 25-20). La Comunidad Valenciana se proclamó campeona al vencer a Cataluña por el parcial de 3-1. El acto de entrega de trofeos y medallas estuvo presidido por Agustín Martín, presidente de la Federación Española de Voleibol.

La participación en este Nacional fue brillante por la consecución de las medallas de plata y bronce en la cancha y también fuera de ella, que estuvo reflejada con el esfuerzo, tesón e ilusión. Además del apoyo incondicional de la afición, formada por familiares y amistades, la llegada de las selecciones a Gijón y Oviedo fue calurosa y multitudinaria, siendo recibidas con banderas y con el grito de «campeones».