Mieres del Camino,
David MONTAÑÉS
En una ocasión un periodista interrogó a Jim Curier sobre el secreto de cómo un jugador de tenis como él, en aparencia exento de sutileza, había llegado a ser número uno del mundo: «Algunas personas tienen el talento de saber sacar o volear bien. Yo tengo el talento de saber competir». El de la raqueta es uno de los pocos deportes en los que el triunfo se pelea en cada carrera, en cada golpe. No basta con jugar bien un rato y vivir de las rentas, hay que asegurarse de que el rival está muerto y no simplemente herido antes de darle la espalda. El tenista mierense Norberto López se ha alzado con el triunfo en la Liga de aficionados que anualmente organiza el Club Tenis Mieres aplicando las máximas de este deporte. Sin ser el principal favorito para conseguir el triunfo, aunque sí un serio aspirante, logró mantener a lo largo de todo el Campeonato una regularidad incontestable. En la fase previa se embolsó siete triunfos en otros tantos partidos y, tras superar tres duras eliminatorias, se plantó en una final por la que pocos apostaban al inicio de la competición. Norberto López y Roberto Lerones fueron los mejores de una Liga que este año, entre Primera y Segunda División, ha reunido a casi 60 aficionados de distintos puntos de la región. Se trata de una cita bien organizada y respaldada por un club en el que la ilusión suple las carencias que padecen todas las entidades modestas.
Durante los últimos meses, en las pistas de Vega de Arriba se han jugado casi 200 partidos correspondientes a la Liga local en sus dos categorías. La carrera de eliminación concluyó el pasado 25 de abril. Sólo podían llegar dos y la final citó a Norberto López y Roberto Lerones. Las apuestas eran favorables al primero, que en las rondas eliminatorias hizo hincar la rodilla a dos ex campeones como Javier Fernández y Ángel Mateos, los exponentes de dos estilos, la técnica y el tesón. El primero no pudo alcanzar su máximo nivel debido a unas dolencias físicas, mientras que el segundo fue un muro que terminó cediendo, sólo, ante el empuje del campeón.
Las previsiones se cumplieron y López impuso su juego de golpes planos y facilidad para la volea. El doble 6-2 final refleja una victoria, cuando menos, holgada. Sin embargo, este resultado no empaña el buen campeonato realizado por Roberto Lerones, que en cuartos de final dio cuenta de uno de los máximos favoritos, David Delgado, que este año no ha encontrado su golpe de raqueta tras cerrar la pasada temporada imponiéndose con brillantez en el Master Cuencas. Posteriormente, en semifinales se impuso a Manuel Vallejo, un hueso con una muñeca envenenada. Lerones se ganó estar en la ronda final peleando cada set, aunque al final pudo faltarle un poco de convicción para mantener a Norberto López más tiempo en pista. Norberto López ya dejó patente en la fase de liguilla su intención de llegar lejos en el campeonato mierense. Ganó los siete partidos que disputó en el grupo A. Sólo otro jugador logró mantener su casillero de derrotas a cero. Jesús Vázquez (Chuso), que el pasado año logró hacerse un hueco entre los favoritos de los diferentes torneos que se celebran en Mieres, también logró el pleno de victoria. No obstante, tras superar en octavos a Ramiro Llaneza, un respetado veterano con mil recursos, terminó cayendo ante Manuel Vallejo.
Mención especial merece también el ya citado Ángel Mateos. El que fuera portero del Caudal Deportivo, entre otros equipos, volvió, como es habitual desde hace años, a colarse en las rondas finales. Sólo el campeón, en semifinales, logró dejarlo en la cuneta. Mateos perdió, pero peleando (6-3, 4-6 y 7-5). Este veterano podría jugar dobles con Jim Curier. Ambos comparten una misma visión del tenis. Silvino Díaz, Sisenando Oliveiros, Francisco Javier González (Toto), Jorge Sariego, Avelino Iglesias, Félix Rodríguez y Joaquín Baquetas completan el cuadro de honor del torneo.
El balance en Segunda División dejó un claro triunfo de Miguel Pérez, que venció en la final a Fermín Rodríguez por un contundente 6-1 y 6-0. Ya en la fase previa saldó todos sus enfrentamientos con victorias, cediendo sólo un set ante José María González, el único oponente que fue realmente una alternativa al otro lado de la red y que, como los dos finalistas, se ha ganado este año el derecho a jugar la próxima temporada en la máxima categoría. También lo harán Guillermo López, José Núñez, Iván Padilla, Mariano Revilla y Exiquio García. Este último, un veterano aficionado, representa a la perfección el espíritu del tenis. Como dijo Bjorn Borg, «ganar o perder un partido depende de las ganas que uno tenga de jugar el último tanto». Norberto López quiso y pudo, pero Exiquio García y otros muchos dejaron litros de sudor en las pistas buscando únicamente ser un poco mejores en cada punto. Al final, en el tenis no puedes domar la raqueta del rival, sólo intentar dominar la tuya.
