Oviedo,

Andrés VELASCO

El Universidad de Oviedo es el equipo más atípico del baloncesto asturiano. Tras una muy mala primera fase asturiana, en la que pasó de ronda con muchos problemas y en la que perdió con equipos de una categoría inferior, ahora es el único equipo del Principado que mantiene opciones de llegar a la última fase de ascenso a la Liga EBA.

El equipo universitario lleva en la fase asturcántabra tres triunfos por dos derrotas, y se jugará su pase a la ronda definitiva mañana, sábado, a partir de las 18.30 horas, en el polideportivo Vicente Trueba de Torrelavega. Su rival, el Merkamueble, un habitual de estas fases que siempre suele rendir a muy buen nivel y que esta vez tiene el factor cancha a favor para tratar de colarse en la última fase de ascenso.

Mientras, el Uni ya no es el equipo de principio de temporada, ni siquiera el de hace un par de meses. Los verdiblancos comenzaron el año en la Liga híbrida que se organizó con los equipos de Primera División nacional y Primera División autonómica, y no lo hicieron nada bien. Quedaron encuadrados en el grupo 2, junto con el Cep Avilesina y Adalid Formación. Los de Oviedo jugaron un mal baloncesto y dejaron escapar muchas victorias contra varios equipos mucho más flojos. Pero cuando tuvieron que cumplir, cumplieron, y derrotaron al Adalid, su rival directo por meterse en la fase asturcántabra. Pero una vez que llegaron ahí, el equipo se transformó.

«Nos motivamos mucho después de una fase en la que nos costó mucho entrar en competición», explica Vicente Álvarez, una de las referencias del equipo. «Nos mentalizamos en defender, vamos todos a entrenar; en definitiva, conseguimos una motivación y una moral que en la fase asturiana nos faltaban», reconoce el «10» verdiblanco.

De cara al trascendental choque ante el Merkamueble, Álvarez lo tiene claro. «La cosa va a ser difícil, porque ellos tienen un equipo muy peleón y con tres jugadores de gran calidad -Respuela, Paco Masa y Davi Gómez-, que pueden resultar desequilibrantes», explica. De todas formas, el Universidad ve opciones de pasar y las basa en un factor: «Ellos se juegan todo y nosotros vamos sin presión. Si empezamos bien y a ellos les entra el miedo, podemos darles un susto y llegar a la última fase», concluye Álvarez.