Gijón, Carlos GONZÁLEZ

Un balón, la calle y, por supuesto, todos los malabarismos posibles con la pelota usando todo el cuerpo excepto las manos. Ésa es la simple filosofía del freestyle. De esta nueva modalidad urbana del fútbol fueron testigos, el pasado fin de semana, decenas de aficionados gijoneses que se acercaron hasta el paseo de Begoña para presenciar la semifinal del Red Bull Street Style.

La competición, organizada por la conocida bebida energética, llegaba a tierras asturianas previo paso por Málaga con rotundo éxito. Gijón era la segunda ciudad elegida encargada de abrir cuatro plazas más para la final nacional de una competición que, tras una última parada en Las Palmas esta semana, congregará a los doce mejores «freestylers» del país en Sevilla, en el monasterio de la Cartuja, el próximo 13 de junio. El vencedor será el encargado de defender los colores españoles en noviembre, en la gran final de São Paulo (Brasil), frente a los otros vencedores nacionales de los más de 50 países en que se disputa esta competición internacional.

En Brasil podríamos ver a dos asturianos. Álex Serrano y Álvaro Bustos se aseguraron en Gijón su presencia en la final de Sevilla merced a su tercer y cuarto puestos, respectivamente. Los dos jóvenes asturianos, de apenas 12 años, poco pudieron hacer frente a la veteranía de los dos foráneos inscritos entre los 16 participantes de la prueba. Jordi Alarcón, «Nen», venido desde Tarragona tras más de doce horas de tren, y Víctor Belver, «Vity», que lo hacía desde la más cercana Zamora, dieron todo un recital de piruetas y toques imposibles que hicieron las delicias del público presente. Finalmente, y tras la indecisión de los jueces para dilucidar un ganador y, por tanto, la necesaria repetición de los tres minutos que dura cada enfrentamiento de esta competición, con turnos de 20 segundos para que cada participante exhiba su dominio del balón, el jurado pudo emitir su veredicto definitivo y dejaba la victoria final en la cita gijonesa en manos de «Vity».

En la prueba de Gijón tuvimos la oportunidad de ver a David Casero, que, sin participar en la cita, nos deleitaba entre enfrentamiento y enfrentamiento haciendo exhibición de sus enormes habilidades con la pelota. David, conocido como «Fútbol» en el mundillo y que forma parte de la caravana de Red Bull allí donde para este torneo, es considerado el pionero del freestyle en España. Hasta hace pocos años trabajaba en una imprenta de artes gráficas, pero un día su suerte cambió. «Por medio de un amigo que trabaja en una empresa de eventos deportivos, me enteré de que Nike estaba preparando una campaña y le mandamos un vídeo mío. Les gustó, me trajeron a alguien para que me grabase y enviaron mi vídeo a Barcelona. Entre muchos otros vídeos de distintas personas, me eligieron finalmente a mí», comenta David.

Era el año 2002 y en ese momento David se convertía en la imagen de la campaña «Freestyle Face Off» de la todopoderosa firma norteamericana de deportes. A partir de ahí empezó a trabajar para las mejores marcas (Adidas, Aguila Amstel, Playstation) y desde entonces «he hecho mil anuncios», indica David. El mejor especialista del freestyle nacional admite que ahora su vida es la pelota y «me dedico por completo al freestyle y al montaje de eventos». Sin embargo, no tiene ningún vínculo fijo con ninguna empresa o marca, sino que «trabajo en lo que me llaman y estoy abierto a todo», recalca.

David, como cualquier muchacho, también jugaba al fútbol, concretamente en el Alcobendas juvenil, que dejó para «dedicarse sólo a esto», y reconoce las bondades del freestyle a la hora de aplicarlo y llevarlo a la práctica en el mundo del fútbol. «Es de mucha utilidad y se puede aplicar perfectamente al fútbol en todo lo que haces. A la hora de hacer un sombrero, un control, es muy importante el manejo del balón. Ronaldinho es el mejor ejemplo de ello», admite. El rey español del freestyle lo considera muy importante para el fútbol sala, «donde puedes destacar muchísimo», reconoce David. Él tiene amigos en el Boomerang madrileño de sala que una vez le vieron jugar y «fliparon», aunque nunca ha pensado dedicarse profesionalmente a esto a pesar de algunas oportunidades que ha tenido. «Tengo 28 años y meterme en eso se me iría de las manos», subraya el madrileño, aunque reconoce que «sí, estaría a un buen nivel, seguro».

Para David, que «inventó» el freestyle, esta modalidad está cambiando un poco y perdiendo su dinamismo. «Ha derivado mucho y la gente hace cosas nuevas, especialmente en el suelo. Hay mucho suelo y cabeza, lo que lo hace más lento. No lo veo tan dinámico. Debe ser más movido, más rápido», reconoce. Sin embargo, lo que nadie puede discutir es que el freestyle está cada vez más de moda y más gente lo práctica día a día. Incluso «inventan nuevos trucos y les ponen un nombre», dice David. El parque, las calles, las playas, cualquier lugar es bueno para realizar toques de balón tan imaginativos y originales como sea posible.

«Lo importante es que practiquen muchísimo. Hay muchos pequeños que le pegan bien. Luego ya es cuestión de tiempo y de que te mole», reconoce David, aunque también da un aviso: «Hay gente a la que por mucho tiempo que dedique a esto no le va a salir», y para los que piensan que pueden vivir de ello, otra pequeña indicación: «Es muy difícil dedicarse a esto profesionalmente. Hay que ser muy bueno y estar en el momento adecuado, pero no se debe nunca pensar en eso, sino en divertirse y mejorar, pero sabiendo siempre que esto más que nada es un hobby», admite el rey español del freestyle.

En esta modalidad urbana de nuevo auge, con esfuerzo y tesón, al menos «los trucos básicos se pueden aprender»; pero, para los más osados con la pelota, David tiene un reto: «Balón debajo de una pierna, levantas esa pierna, le pegas con el empeine para que te pase el balón por encima y luego pillarlo. No hay nadie que lo haga. Eso no se lo he visto ni a Ronaldinho», asegura el maestro del freestyle español.