Oviedo, Marco RODRÍGUEZ

La localidad ovetense de Trubia vivió el pasado fin de semana sus «IX Jornadas del Deporte», bajo la organización de la Asociación Cultural y Recreativa Trubia. Una edición dedicada a los deportistas con discapacidad intelectual. De nuevo, este año la convocatoria fue un éxito, a pesar de la pertinaz lluvia que acompañó los diferentes actos.

Todo comenzó el viernes, con la presentación de las jornadas, que contó con las intervenciones de la vicepresidenta de la asociación organizadora, Sira Álvarez; la directora de la entidad FEAPS, Aida Díez; el director del Colegio de Villar-Trubia, Manuel Valle; el director de la Agencia Asturiana para la Discapacidad, Javier Antuña; el alcalde de barrio, Víctor Manuel Alonso, y el ex guardameta del Real Oviedo, Sabino Zubeldia, como representante de los deportistas.

Éste último fue quien encendió la «Antorcha del Deporte», gesto que caracteriza a estas jornadas desde que fueron creadas. Tras Zubeldia, deportistas de gran nivel y procedentes de distintas disciplinas, fueron realizando los diferentes relevos por las calles de Trubia. Entre ellos, los aficionados pudieron disfrutar de la presencia del atleta leonés Manuel Rabanal García, ganador absoluto de la Media Maratón de Trubia 2010; del levantador Adriano Méndez; del boxeador Juan José Gómez; del jugador de rugby Pelayo Castaño; de la jugadora de bowling Carmen Peón; del jugador de hockey sobre patines Omar Fernández; del jugador de squash Santiago Solla, y del tirador Jorge Díaz.

De realizar el relevo en bicicleta se encargó el ex ciclista profesional Manuel Jorge Domínguez. En el caso del relevo en agua se contó con la presencia de diferentes integrantes de la Federación Motonáutica del Principado de Asturias, como Borja Jiménez, Andrés Martínez, e Israel Menéndez. El club de piragüismo Los Carbayones cerró el ciclo. La lluvia provocó que el sábado se moviera todo el programa previsto de la Plazoleta de Trubia al Colegio de Villar.

Allí se celebraron las pruebas adaptadas y el resto de actividades. Tras la comida se hizo entrega de trofeos y recuerdos a los participantes y todo culminó con un fin de fiesta con baile en la pista cubierta del colegio. En la jornada de clausura participaron 380 deportistas, entre discapacitados psíquicos -sensoriales e intelectuales- y alumnos del centro.