Mieres del Camino,

David MONTAÑÉS

El Ayuntamiento de Mieres ha encontrado una nueva fórmula para lograr financiación para sus obras. Por primera vez en su historia, el Consistorio ha recurrido al «método alemán» de pago aplazado. Mediante este sistema se abordará la ampliación de la nueva piscina municipal de Vega de Arriba. En concreto, se construirá un nuevo recinto entre la actual instalación y la bolera, que albergará el gimnasio. La empresa concesionaria de la piscina cubierta asumirá la actuación, valorada en algo más de 800.000 euros, y el Ayuntamiento reembolsará la cantidad a lo largo de los próximos diez años.

Los responsables municipales explicaron que es la primera vez que un Ayuntamiento de la comarca del Caudal pone en marcha un proyecto mediante este sistema. En esencia, el citado método consiste en pagar la obra como se paga un piso: llave en mano, es decir, no desembolsar dinero a la constructora hasta que la obra esté concluida y, además, abonarla a plazos, en varios años. El sistema lleva años siendo utilizado por los estados, sobre todo, para acometer la construcción de grandes infraestructuras. De esta forma, logran garantizar la inversión sin tener que tener en ese momento una cobertura económica para la totalidad del proyecto.

Las instalaciones de Vega de Arriba, en las que el Ayuntamiento de Mieres y el Gobierno regional invirtieron 1,4 millones de euros, cuentan con una piscina central, climatizada, de ocho calles y un segundo vaso infantil de verano. Además, disponen de un gimnasio para musculación y fitness, zonas deportivas para fútbol y voley-playa, salas de usos múltiples, solárium de verano y salón de saunas.