La Vega (Riosa),
David MONTAÑÉS
El Principado acometerá durante el verano una nueva actuación de mejora en los últimos seis kilómetros de la ascensión al Angliru. Esta intervención, dotada con un presupuesto de 250.000 euros, tiene como objeto acondicionar el puerto con vistas a la etapa de la Vuelta Ciclista a España que se disputará en septiembre.
El director general de Administración Local, José Luis Montes Suárez, mantuvo ayer una reunión con al alcalde del concejo, José Antonio Muñiz, para explicar los contenidos del proyecto. Las obras, según expuso el responsable regional, arrancarán a finales de junio y se prolongarán hasta finales de agosto. Se mejorará el firme y se reforzará la seguridad. Además, se potenciará el sistema de protección contra argayos con mallas metálicas que actualmente está operativo. Esta actuación entronca con la realizada en la primera mitad de la ascensión, es decir, entre La Vega y Grandiella. Las labores en esta parte de la subida terminaron recientemente tras la ejecución de un proyecto respaldado por una inversión de 1,3 millones de euros. Con estas mejoras, el Ayuntamiento de Riosa considera que están cubiertas las exigencias reclamadas por la organización de la Vuelta (Unipublic) para garantizar el normal desarrollo de la esperada etapa.
La comarca del Caudal tendrá una relevancia especial en la próxima edición de la Vuelta a España. Además del Angliru, también se celebrará un final en alto en San Isidro, con llegada en la estación invernal de Fuentes de Invierno. El Angliru ya ha disfrutado de tres finales de etapa (1999, 2000 y 2002). El éxito de cada una de las citas, estableciendo registros aún sin superar en las audiencias televisivas, chocó con el rechazo de una parte de los equipos por la excesiva dureza de sus rampas y la falta de espacio para dar cobertura a la enorme infraestructura que mueve una prueba de este tipo. Riosa espera que el reencuentro con la ronda nacional determine la eclosión definitiva del gigante del Aramo como referente turístico. Las previsiones iniciales son que el 13 de septiembre, un sábado, se den cita entre 100.000 y 120.000 espectadores en la falda del puerto. José Antonio Muñiz considera que el único elemento que podría deslucir un tanto la prueba y la jornada de fiesta sería la aparición de la lluvia: «Los antecedentes garantizan el éxito y, por ese mismo motivo, la organización de la Vuelta a España ha apostado por recuperar esta etapa tras años de ausencia».
