Cabañaquinta, C. M. B.

Las reacciones a la creación de un parque eólico en Aller no se han hecho esperar. La presidenta de la plataforma contra Sama-Velilla, Marisol Rodríguez Bigotes, mostró ayer su rotunda oposición a esta actuación y denunció que «decir sí a la apertura de este parque es abrir las puertas a Sama-Velilla o a otra línea de alta tensión que evacue la energía eléctrica». Por su parte, el regidor del concejo, Gabriel Pérez Villalta, negó rotundamente que el equipo de Gobierno, como denunció IU, esté negociando con una empresa de energía eólica y aseguró que durante el actual mandato, «no se hará ninguna actuación de este tipo». Subrayó que será la próxima Corporación quien decida sobre la necesidad del proyecto. De esta forma, matizó las declaraciones del vicealcalde, David Moreno Bobela, en las que aseguraba que el Ayuntamiento se plantea un cambio en el Plan General de Ordenación Urbana para permitir la instalación de un complejo de este tipo en el suelo del municipio.

Marisol Bigotes no sólo se posiciona completamente en contra de la creación de un parque eólico en el concejo si no que va más allá y asegura que el colectivo «no descarta tomar medidas legales contra cualquier irregularidad que nos perjudique en el camino hacia nuestro objetivo». De esta forma, Bigotes también se muestra completamente en desacuerdo con la instalación de un medidor en Cotobello, que en este momento está sobre la mesa de la comisión de Urbanismo del Aller, ya que «decir que sí a una torre de medición es coquetear con el seductor» y, de esta forma, propone al Consistorio «poner la venda antes de la herida». Bigotes anunció que solicitará un encuentro con el equipo de Gobierno, ya que «siempre nos ha apoyado y correspondido correctamente».

El alcalde del municipio negó rotundamente que el Ayuntamiento mantenga conversaciones con una empresa eólica para construir un parque en el concejo y se comprometió a no permitir ninguna actuación de este tipo «en lo que queda de legislatura». El veterano regidor socialista dejó claro que él, personalmente, no respalda estas actuaciones, aunque también señaló que «no entro en lo que puedan hacer otros».