Oviedo

El Juzgado de lo Penal número dos de Oviedo ha condenado a un vecino de la localidad mierense de Ujo, A. S. V., a seis meses de prisión y al pago de una multa de 900 euros por un delito de incendio forestal cometido por imprudencia grave. Según informó ayer la Fiscalía Superior del Principado, la sentencia se dictó de conformidad con el acusado, natural del barrio de Santa Eulalia, tras el acuerdo alcanzado entre su defensa y el fiscal delegado de Medio Ambiente y Urbanismo, Joaquín de la Riva. El juez le condena además a indemnizar a Bomberos de Asturias con 729,59 euros y a una pareja de particulares, a la que afectó el fuego, con 3.000 euros.

Según el relato de los hechos, el 13 de marzo de 2008 el acusado realizó labores de limpieza de restos vegetales en una finca de su propiedad, en las inmediaciones de Villar de Ujo. El condenado carecía de la autorización para realizar una quema. Además, ha quedado demostrado que lo hizo sin adoptar «las más elementales precauciones». Finalmente, el fuego se «descontroló» y afectó a varias propiedades limítrofes de praderías y bosque autóctono. Fue necesaria la intervención de los Bomberos, que trabajaron durante horas en la zona.

El mismo Juzgado de lo Penal número dos de Oviedo ha condenado también a otro vecino de Mieres, A. O. S., al pago de una multa de 1.440 euros por colocar un cepo dentado en un paso de animales, en el que quedó atrapado el perro de un vecino del pueblo de Prao Redondo. Los hechos sucedieron dentro de los límites del coto regional de caza del municipio.

Según informó la Fiscalía Superior del Principado, la sentencia también se dictó de conformidad con el acusado, que asumió por su parte la autoría de los hechos que se le imputaban. Inicialmente, la Fiscalía había solicitado para el hombre, acusado de un delito contra la fauna, una pena de 4.800 euros de multa, a razón de 10 euros diarios durante 16 meses. Según las conclusiones provisionales del Ministerio Público, sobre las nueve de la noche del 10 de junio de 2009, un perro de un vecino de A. O. S. quedó atrapado en el artilugio, en las inmediaciones de la localidad de Prao Redondo. El animal necesitó asistencia veterinaria, si bien su dueño no reclamó indemnización.