Mieres del Camino, P. C.

La compañía eléctrica Enel Viesgo construirá una nueva línea de alta tensión entre la subestación de Santa Cruz, en Mieres, y las cercanías de la población de Caborana, en Aller, para «mejorar y garantizar el suministro eléctrico en la zona». La línea tendrá más de tres kilómetros de longitud y un mínimo de 12 apoyos.

Enel Viesgo ya ha iniciado los trámites para ejecutar el tendido y la Consejería de Medio Ambiente acaba de dictar una resolución en la que señala que «vistas las características del proyecto, ubicación, relevancia y repercusiones del potencial impacto, así como las observaciones recibidas durante la fase de consultas previas», la construcción de la línea no precisa del trámite de evaluación ambiental y únicamente estará sujeta a una evaluación preliminar.

El proyecto de línea eléctrica entre Santa Cruz y Caborana contempla tres alternativas. La alternativa A tiene 3.072 metros de longitud, necesitaría la colocación de 12 apoyos (torres) y la superficie afectada en vuelo con arbolado sería de 24.898 metros cuadrados. La alternativa B tiene 3.537 metros de longitud, necesita 19 apoyos y afecta a una superficie de 39.569 metros cuadrados. Y la alternativa C tiene 3.610 metros de longitud, necesita 20 apoyos y afecta a una superficie de 36.904 metros cuadrados. La línea tendrá en todos los casos doble circuito y una tensión nominal de 132 kV, si bien inicialmente funcionaría a 30kV.

El documento presentado por Enel Viesgo señala que la alternativa A sería la que causaría menos interferencias con el medio ambiente ya que «en su mayoría discurre por pastizales y monte bajo de difícil orografía y escaso valor, evitando en lo posible zonas de arbolado. Además apunta que ese trazado es el que tiene menor número de apoyos y que se podrían aprovechar antiguas pistas y caminos que llegan hasta antiguas explotaciones mineras para acopio de materiales y circulación de la maquinaria.

En el tramite de consultas previas, la Dirección General de Política Forestal destacó la necesidad de que se analizaran los riesgos de incendio y la Dirección General de Patrimonio Cultural que se realizara un informe arqueológico sobre el grado de afección a los petroglifos de Grameo.