Mieres del Camino,

David MONTAÑÉS

Los vecinos y empresarios de la zona norte de Mieres han solicitado la intervención del Ayuntamiento debido a los «insufribles» malos olores que desde hace ya más de una semana padece toda esta zona del concejo. Tras una investigación llevada a cabo por las asociaciones afectadas, el foco del hedor se localiza, a expensas de que lo corroboren los técnicos municipales, en la factoría de la firma de alimentación Ovo Foods, participada por Hunosa a través de su filial de diversificación Sadim. La fábrica produce derivados del huevo en su planta del polígono mierense de Baíña. La propia compañía ha reconocido, según explicaron los portavoces de la asociación de vecinos de la citada localidad, que el problema está causado por el mal funcionamiento de la depuradora que acaba de entrar en servicio en la fábrica.

La concejal de Urbanismo, Olga Álvarez, explicó ayer que el Ayuntamiento de Mieres es conocedor del problema que existe en la zona norte del concejo. En este sentido, matizó que técnicos municipales de Medio Ambiente visitarán próximamente la planta de Ovo Foods para «analizar la situación y recabar información sobre la causa de este contratiempo».

Los malos olores que genera desde hace algo más de una semana la planta de Ovo Foods son calificados de «insoportables» por vecinos y empresarios. El vicepresidente de la asociación de Baíña, Juan Fernández, aseguró que hay momentos durante el día es que «no podemos abrir las ventanas de casa, ya que te entran vómitos». Los portavoces de la plataforma empresarial del polígono de Baíña se manifiestan en los mismos términos: «Resulta complicado aguantar el olor y ya llevamos así muchos días». El Ayuntamiento de Mieres tiene previsto supervisar las instalaciones de Ovo Foods de manera «inmediata».

El radio de influencia de los malos olores se extiende por toda la zona norte del concejo, desde La Pereda hasta Ablaña, y se hacen más intensos cuando está en funcionamiento la depuradora. Inicialmente, Ovo Foods operaba con la depuradora del polígono de Baíña, pero hace meses fue requerida para que construyera su propia planta de tratamiento de residuos: «Nos han dicho que la nueva depuradora no acaba de funcionar bien y que intentarán solucionar el problemas, pero ya ha pasado más de una semana», explicó Juan Fernández.