Mieres del Camino,

J. VIVAS

Una semana. Ese es el plazo que se han marcado los trabajadores de la empresa de transporte de viajeros Enferbús, la concesionaria de la línea que conecta Mieres y Lena con Oviedo por carretera, para que el empresario les abone las nóminas que les adeuda. En caso contrario, iniciarán un calendario de movilizaciones que podría llegar, incluso, a paros parciales del servicio.

El comité de empresa mantuvo ayer una reunión en la que decidió dar un ultimátum al propietario de Enferbús. «Vamos a esperar una semana. Tras la última denuncia, conseguimos que se nos abonase la nómina de enero, pero todavía queda por cobrar febrero. Además, debería de pagarnos una extra el día 15», señalaron ayer los trabajadores. Sin embargo, no las tienen todas consigo. «Desde la gran huelga que protagonizamos en 2009, cuando obligamos al empresario a que nos readmitiera, siempre hemos tenido problemas para que nos pague cualquier cosa que se encuentre fuera del salario base. Ni horas de más, ni pagas extras. Siempre ha tenido que ser con una reclamación judicial y, a veces, ni con esas», aseguraron. Por ello creen que las movilizaciones «serán probablemente la única solución a la que aferrarnos para que nos haga caso». Las protestas tampoco serán como las del pasado. «Sufrimos mucho entonces y no sé si seríamos capaces de volver a repetirlas», apuntaron. Eso sí, no descartan actuaciones informativas, tanto con usuarios como con otras administraciones, como el Ayuntamiento de Mieres o el Consorcio de Transportes de Asturias. Tampoco desechan realizar paros, aunque parciales, «porque los usuarios tampoco tienen la culpa».

La polémica entre empresario y trabajadores de Enferbús se volvió a reavivar hace unos días cuando los segundos denunciaron que llevaban dos meses sin percibir su salario. El propietario de la concesionaria, según explicaron desde el comité de empresa, había asegurado a los trabajadores que no podía pagar las nóminas porque el Consorcio de Transportes de Asturias (CTA) no le estaba abonando lo que le correspondía por explotar el servicio de viajeros con la capital ovetense. Pero los trabajadores no se quedaron con esa explicación y acudieron al CTA.

«El consorcio ha pagado religiosamente todos los meses, tal y como nos comentaron. El empresario nos estaba mintiendo», señalaron los trabajadores. A pesar de no lograr sus objetivos al 100%. Los trabajadores sí cobraron finalmente la nómina de enero. Fue en la jornada de ayer y tras hacerse pública su denuncia. «No nos cabe en la cabeza que antes nos dijera que no tenía dinero para pagarnos la nómina y, de la noche a la mañana, nos la abone, como ocurrió el viernes», destacaron desde el comité de empresa. Los trabajadores desarrollarán con normalidad su labor a lo largo de esta semana, siguiendo el plazo marcado. También celebrarán varias reuniones del personal para recabar las opiniones de todos los compañeros y analizar qué medidas se pueden tomar y cuándo, siempre en el caso de que no solucionen su situación con la empresa.