Mieres del Camino,

David MONTAÑÉS

El Gobierno de Mieres ya se ha puesto a trabajar para desarrollar el plan de viabilidad de sus cuentas que reclama el Gobierno central a todas las administraciones locales para acogerse al nuevo programa estatal de amortización de la deuda a proveedores. El alcalde, Aníbal Vázquez, adelantó ayer cifras concretas y el balance deja muy claro que el Ayuntamiento tendrá que apretarse el cinturón casi hasta la asfixia. El regidor puntualizó que este año el Consistorio deberá reducir sus gastos en cerca de 4 millones, 3,5 en el mejor de los casos. Se trata, según explicó, de un requisito indispensable para nivelar ingresos y gastos y, de esta forma, evitar ser «intervenidos» por la administración central.

Los actuales gestores municipales de IU se reunieron ayer con los sindicatos para explicarles las directrices del plan de ajuste. Antes, el miércoles, hicieron lo propio con los grupos de la oposición. El encuentro con los representantes de los trabajadores tuvo, por momentos, un tono muy crispado, con acaloradas discusiones. El interventor municipal fue el encargado de fijar los objetivos de ahorro, pero de momento el Gobierno local no ha adelantado, ni a los sindicatos ni a la oposición, de donde piensa arañar para reducir el gasto en más de 3,5 millones.

El Ayuntamiento de Mieres, como el resto de entes municipales, tiene hasta el próximo 15 de marzo para trasladar telemáticamente y con firma electrónica a Hacienda una relación de todas las obligaciones de pago. Así consta en el proyecto de ley orgánica que acaba de aprobar el Consejo de Ministros para posibilitar la creación del mecanismo de financiación a los ayuntamientos. Aníbal Vázquez apuntó que la previsión inicial es que el Consistorio presente una minuta de diez millones de euros. Una vez conocida toda la información sobre el montante de las facturas pendientes de pago, la Corporación local deberá elaborar antes del 31 de marzo un plan de viabilidad de sus cuentas.

La portavoz municipal del grupo socialista, Diana González, reclamó ayer al Gobierno de IU que presente cuanto antes su plan de ajuste para «poder debatir sobre su contenido». La edil del PSOE instó de igual forma al equipo de Aníbal Vázquez a que «fije una posición política sobre los directrices que seguirán a la hora de proceder a los recortes». La magnitud del mordisco que será necesario dar al gasto pone en el punto de mira apartados hasta ahora intocables, como el propio personal municipal, la empresa municipal de transportes (Emutsa) o la Casa de la Música.