«El buen poeta habla de lo que conoce; no cuenta sus penas, elabora sentimientos»

Mieres del Camino,

C. M. BASTEIRO

Ángeles Carbajal (Argüelles, Siero, 1959) es la ganadora del Premio de Poesía «Teodoro Cuesta» de Mieres en su duodécima edición. Carbajal, licenciada en Historia del Arte y directora de talleres de lectura y creación literaria, es la primera mujer que recibe el galardón en los últimos diez años. En esta ocasión, el premio esta dotado con 3.000 euros y la publicación de la obra ganadora, titulada «En campu abierto».

-¿Esperaba ganar?

-No sabía si podría conquistar al jurado. Los concursos son complicados. Hay una base objetiva, pero la mayor parte de la decisión se basa en opiniones subjetivas, dependiendo del gusto de las personas que hacen la selección y por eso no tenía ni idea de lo que iba a pasar. Quiero pensar que eligieron «En campu abiertu» porque es un buen poemario.

-¿De qué trata este nuevo trabajo?

-En «En campu abiertu» hablo de lo desprotegidos que nos sentimos cuando salimos al mundo, frente a la protección que da la niñez y el entorno familiar. La voz es la de una niña que recuerda que era y en lo que se ha convertido. Está ambientado en Argüelles, en Siero, el pueblo en el que me crié.

-¿Siempre se inspira en lo que conoce?

-Un poeta, como cualquier persona que se dedica a escribir, habla de lo que conoce. Como decía Fernando Pessoa, el poeta es un fingidor. Finge tan completamente, que hasta finge que es dolor, el dolor que en verdad siente. Esta es la base de la poesía, no es un mundo real sino universal. El buen poeta no cuenta sus penas, si no que elabora los sentimientos.

-Imparte talleres de creación literaria, ¿es difícil enseñar a escribir?

-No, en los talleres de creación literaria no se enseña a escribir. Se impulsa, se apoya y se dan ideas además de orientar a los escritores. Pero no se enseña. Hay gente que se pierde en su propio talento y es importante guiarlos. Decirles lo que está bien y por qué me gusta.

-Este año se ha rebajado la cuantía del premio «Teodoro Cuesta» de poesía, que pasa de 4.000 a 3.000 euros, ¿cómo afecta la crisis al mundo de la literatura?

-A mi la dotación económica es lo que menos me importa. Lo esencial es el prestigio del «Teodoro Cuesta» y que mi libro se publique y llegue a la persona adecuada. La crisis económica afecta a la literatura como al resto de sectores. Los escritores tenemos que pasar la crisis como los demás, somos igual que el resto de profesionales.