La Guardería del Principado de Asturias abatió a una loba en el entorno del paraje morciniego de La Collá. La actuación ha generado polémica entre los ganaderos de la zona porque el Principado llevaba meses achacando a unos perros los ataques que se han sucedido en el municipio y que han terminado con más de sesenta reses en la última temporada.

Borja García es uno de los ganaderos que ha sufrido pérdidas de reses en los montes de Morcín. Desde el pasado mes de octubre, ha perdido cinco cabezas de su rebaño de oveya xalda y no ha percibido ni un solo euro de indemnización. «Entendería que no pudieran pagarlo por la difícil situación económica, pero lo que no entiendo es que se nos trate como si fuéramos tontos», explicó García. Según señaló, «en la Consejería de Agroganadería llevan meses diciéndonos que esta zona no es lobera, que es imposible que haya ni un solo ejemplar y ahora vemos que es mentira». El pasado sábado, la Guardería recibió el aviso de un ganadero de Otura. «El ganadero alertó de que había un lobo en su propiedad y que estaba atacando al ganado», explicó García. El Principado activó un control y se mató a una hembra en la zona, en el entorno de La Collá.

Desde la Asociación de Ganaderos Afectados por el Llobu (AGALL) en la comarca del Caudal también han dado su opinión. Exigen a la Directora General de Recursos Naturales del Principado de Asturias, Fina Álvarez, que explique «por qué se dice que hay perros salvajes atacando mientras que se están matando lobos en la zona». Los portavoces de la entidad criticaron que el Principado cuenta con una «escasa» partida de 850.000 euros para pagar todos los daños que causan los animales salvajes en el ganado doméstico.