El PP de Mieres ha solicitado al gobierno local que el Ayuntamiento "limpie y adecúe" la parcela que se encuentra anexa al campo de fútbol de Ablaña, propiedad de Hunosa, y que utiliza en el Club Deportivo Santa Marina. La directiva de la citada entidad deportiva reclama que los citados terrenos puedan ser habilitados como terreno de juego, quedando a disposición de sus categorías inferiores. El PP explicó que Hunosa está dispuesta a colaborar, aportando la tierra que sea necesaria para niveles la parcela.

El club deportivo Santa Marina accedió hace un año a las instalaciones deportivas que Hunosa tiene en la localidad mierense de Ablaña. Tras varios años de polémica respecto a la ubicación de este club que integra a casi doscientos jugadores entre niños y jóvenes, el PP intercedió ante la hullera estatal para permitir la cesión del campo de fútbol logrando finalmente el visto bueno de la dirección. Ahora, la entidad quiere disponer de una finca municipal anexa al viejo estadio, que se encuentra en desuso. De esta forma pretenden contar con un terreno de juego para entrenamientos, preservando el césped del terreno de juego principal. El PP ha vuelto a jugar un papel mediador. Ha solicitado al gobierno local que el Ayuntamiento elimine la maleza y realice una actuación para nivelar el terreno. En caso de ser necesario, Hunosa aportaría también materiales.

"Nuestra intención es que se mejoren y amplíen estas instalaciones colaborando, siempre en la medida de lo posible, ya que somos conscientes de la delicada situación de las arcas municipales, para adecuar la parcela municipal", señalaron ayer los portavoces del grupo municipal del PP.

El Santa Marina lleva ya casi un lustro buscando unas instalaciones deportivas que permitan a la entidad desarrollar su actividad como club formativo. Inicialmente estaba previsto que se construyera un nuevo campo de fútbol en Ablaña, que se debía financiar con 1,2 millones de fondos mineros. El proyecto llegó a remitirse al Ministerio de Industria, pero el convenio quedó bloqueado cuando el Ejecutivo central suspendió las inversión del Plan del Carbón. Se buscó entonces otras alternativas. El Club Deportivo Santa Marina obtuvo una autorización de la Universidad para que la entidad deportiva pudiera utilizar el campo de fútbol de Barredo. Tras caducar este permiso, Hunosa cedió las viejas instalaciones que tiene en la localidad de Ablaña.