El puente de Campomanes ha suscitado una nueva polémica. Los vecinos de la localidad denunciaron ayer que la Jefatura del Servicio de Conservación de Carreteras del Principado ha ordenado su cierre al paso de peatones, sin ofrecer una alternativa para los viandantes. La estructura, en la que han perdido la vida dos hombres tras caer al río, está en muy mal estado desde las inundaciones de 2011 y une los barrios de El Mercadil.lu y La Rúa.

La queja surgió de la asociación de vecinos. Según explicaron los portavoces de la entidad, "nos colocaron sobre el puente una señal de prohibido el paso y pusieron unas biondas sin avisar". A pesar de que llevaban meses criticando la falta de seguridad en el paso, no era la medida que esperaban porque "ahora nos hemos quedado sin un lugar para los peatones. Por aquí no podemos caminar y por la carretera tampoco".

La calzada de la N-630, a su juicio, no es más segura que el puente. "Se estrecha en algunos puntos y es imposible que podamos pasar sin que nos atropelle un coche". Es por eso que los vecinos han decidido ignorar la señal, saltar las biondas y seguir utilizando el puente.