La piscina municipal de Vega de Arriba, abierta el pasado 6 de abril, sigue sumando abonados. En los últimos quince días, desde que se abrió el plazo para que se matriculasen los usuarios, un total de 276 personas han decidido hacerse socias del equipamiento deportivo en sus diferentes modalidades: piscina, gimnasio o el abono para ambas instalaciones.

El equipo de Gobierno de Mieres se mostró moderadamente satisfecho con el ritmo de comercialización de los abonos. Tras quince meses con la instalación cerrada desde que IU decidiese remunicipalizar el servicio, los gestores municipales esperaban una inscripción más numerosa, aunque se muestran optimistas de cara al futuro. Desde el equipo de Gobierno señalaron ayer que esperan que se produzca un repunte en las matriculaciones tras el verano: "ahora es un periodo en el que con la llegada del buen tiempo mucha gente esperará ya a volver de las vacaciones para apuntarse y poder hacer deporte en la piscina cubierta y el gimnasio durante el invierno", señalaron las fuentes.

No es menos cierto que el proceso para hacerse socio del equipamiento deportivo resulta por momentos "tedioso", tal y como explicaron a este diario algunas de las personas que ya se han abonado. Según apuntan varios de los usuarios que han acudido a matricularse a la piscina, los trámites administrativos les han llevado "media mañana". Por ello, los deportistas reclaman que el Ayuntamiento tome medidas para que hacerse socio de la piscina de Vega de Arriba sea una operación que conlleve unos trámites tan lentos. En algunos casos, apuntaron, las esperas han sido superiores a la hora.