El nuevo hospital Vital Álvarez-Buylla de Mieres, inaugurado hace poco más de año, ya está comenzando a dar los primeros resultados en la mejora de la calidad asistencial y atención a los pacientes, lo que se traduce en una reducción de las esperas medias que los ciudadanos tienen para realizarse diversas pruebas o intervenciones. Según los datos a los que ha tenido acceso este diario, gracias a la modernización de las instalaciones, en comparación con el viejo hospital de Murias, el Álvarez-Buylla ha logrado reducir en 9 días la demora media para una primera consulta con el especialista. Desde el hospital hacen una valoración "muy positiva" ya que "en el contexto nacional, son cifras de espera muy aceptables".

La dirección del hospital ha logrado el primer gran objetivo que se había marcado, que no existan esperas de más de seis meses para una intervención quirúrgica. A partir de ahí, la demora media para que un paciente sea operado se sitúa en un 60,9 días, es decir, poco más de dos meses. La cifra se sitúa en los mismos parámetros que el pasado ejercicio, pero hay un detalle a tener en cuenta. Según explican los responsables del centro sanitario mierense, ahora se hacen más intervenciones quirúrgicas, lo que dificulta que se mantengan las buenas estadísticas respecto a las esperas. "Hay más quirófanos y se hacen más operaciones. Estamos satisfechos con el rendimiento", señala Juan Saavedra, director de Atención Sanitaria y Salud Pública del Área VII.

Respecto a los valores para que un paciente sea citado para una primera consulta de un especialista tras ser derivado por la Atención Primaria, las estadísticas se han mejorado notablemente. Hace un año, la espera era de 43 días hasta que se producía la consulta, mientras que actualmente, la demora media se ha reducido a los 34 días. Hay que tener en cuenta, explican los profesionales sanitarios, que también depende de la especialidad.

En cuanto a las pruebas más habituales que se les realizan a los pacientes, las cifras también son parecidas a las registradas en el último año de actividad del viejo Murias, tal y como explicó el propio Saavedra. A día de hoy, la demora media para que el paciente sea llamado para practicarle un TAC es de 27,3 días, para una resonancia es de 58,2 días y para una colonoscopia de 51,2 días.

El doctor Juan Saavedra explicó que "estamos cumpliendo los objetivos que nos marcamos, y estamos muy contentos. Además, hay que tener en cuenta que 34 días de espera para un hospital como el nuestro es un buen dato porque tiene dos peculiaridades importantes". El responsable de Atención Sanitaria indicó que estas dos características son, por un lado, que el nuevo Álvarez-Buylla no envía patologías fuera. "Nosotros no derivamos a enfermos a otros hospitales", indicó. Sin embargo, el inmueble de Nuevo Santullano sí que acoge pacientes de otros hospitales como el Valle del Nalón, Cabueñes o el Hospital Central de Asturias. "Por todo esto pensamos que se están haciendo bien las cosas y esperamos seguir mejorando con el paso de los meses".