Los quirófanos del hospital Vital Álvarez Buylla de Mieres vuelven a funcionar a toda máquina. Tras diez días de cierre, ayer se realizaron las primeras intervenciones quirúrgicas. Estaban programadas hasta trece operaciones. Además, según han explicado fuentes hospitalarias, el cierre de los quirófanos no ha provocado en estos diez días apenas alteraciones. En total, se derivaron siete casos a otros hospitales para que los pacientes fueran intervenidos.

Durante los últimos diez días, en los que se realizaron obras de mejora y rehabilitación de los quirófanos del hospital del Caudal, los médicos decidieron trasladar solamente a siete pacientes, cinco de ellos al HUCA y dos al Hospital Valle del Nalón. Con el fin de evitar trastornos, la política seguida fue la de que los enfermos que no precisaran de una cirugía de forma urgente, y cuyo estado fuese estable, esperasen ingresados en el hospital hasta que funcionaran los quirófanos.

Los cinco traslados que recibió el HUCA correspondieron a patologías que necesitaban una intervención urgente. El 1 de agosto, se trasladó a una persona que precisó una intervención por una perforación intestinal. Al día siguiente hubo otro traslado, el de un paciente que padecía un vólvulo. El día 5 de agosto, el hospital mierense trasladó al Central a dos pacientes, ambos aquejados de una apendicitis. Uno de ellos era un paciente pediátrico y, aunque los quirófanos de Mieres hubieran estado operativos, se le hubiese derivado igualmente a Oviedo. El último paciente trasladado al HUCA fue diagnosticado con un carcinoma. Al hospital Valle del Nalón llegaron desde Mieres dos pacientes, uno el pasado día 4 y otro el día 9 de agosto. Ambos padecían dolencias tratadas en el servicio de Urología y precisaron de intervenciones.

Los quirófanos de Mieres, según los datos a los que ha accedido este diario, reanudaron su actividad ayer con seis operaciones de Traumatología. También hubo otras seis de Dermatología y una última de Medicina General. Todos los pacientes que pasaron ayer por las salas de operaciones eran precisamente aquellos que estaban hospitalizados en espera de una intervención. A partir de hoy, los especialistas comenzarán de nuevo a planificar y programar las operaciones con normalidad.