El tanatorio de Mieres lleva más de una semana con su horno crematorio fuera de servicio. Los responsables de la instalación explicaron ayer que es debido a unas obras de "reparación y mantenimiento" que han tenido que abordar en este momento.

Estas labores han obligado a trasladar todas las incineraciones que se hacían en Mieres a otros tanatorios de la red, fundamentalmente a Oviedo. Se siguen ofertando servicios funerarios y las salas se mantienen abiertas y operativas, con la salvedad de que las incineraciones se realizan fuera de Mieres.

Estos trabajos, según apuntaron los responsables del tanatorio mierense, se extenderán durante al menos diez días, aunque la previsión es que el servicio completo no vuelva a reactivarse hasta dentro de unas dos semanas. Mientras tanto, las incineraciones -se realizan hasta cuatro al día- seguirán llevándose a otros centros.

El de Mieres y el de Moreda conforman la red de tanatorios del Caudal, y son los dos únicos en la comarca. El mierense, eso sí, es el único que cuenta con servicio de crematorio.