La Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) ha iniciado la limpieza del río Aller para evitar las inundaciones durante los próximos meses. La entidad tiene previsto dragar más de 10.000 metros cúbicos de depósitos del cauce, en el entorno del puente de La Casanueva de Moreda. Se trata de una de las zonas más problemáticas en el discurso del río.
Las labores comenzaron ayer, con la pesca eléctrica de las truchas que había en el lugar. Este sistema permite poner a salvo a todos los peces antes de que las máquinas empiecen a trabajar. Los trabajos se desarrollarán durante la próxima semana y, por lo momento, no se han anunciado actuaciones en otros puntos del concejo.
El alcalde, David Moreno (PSOE), acudió ayer al lugar de las obras para seguir el avance de cerca. "Nos sentimos satisfechos con esta actuación, que permitirá poner a salvo la zona ante posibles crecidas en los próximos meses", afirmó el máximo representante local.
El entorno de La Casanueva es un lugar conflictivo en lo que a crecidas del cauce se refiere. Durante el temporal de lluvias de junio de 2011, un grupo de vecinos tuvieron que abandonar sus viviendas después de que la crecida del cauce amenazara las estructuras. El desbordamiento del río, entonces, también provocó un gran argayo en el Corredor del Aller a su paso por Caborana. Fue uno de los daños más grandes de la región y mantuvo un carril cerrado al tráfico -aunque la circulación siguió en doble sentido- durante más de dos años. La Confederación toma ahora medidas para que los vecinos no pasen de nuevo por un mal trago.
