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Los pescadores se unen para evitar que los cormoranes "esquilmen" los ríos

Cinco asociaciones de la comarca exigen al Principado que incremente las batidas

Varias decenas de cormoranes, en el río Caudal a la altura de Santullano. FERNANDO GEIJO

Las asociaciones de pescadores de la comarca, tras años quejándose, están firmemente decididas a poner coto a la proliferación de cormoranes en la comarca del Caudal. Hasta cinco colectivos se han unido para solicitar al Principado por escrito, que aumente el control sobre la población de estas aves. Actualmente la guardería tiene asignada la eliminación de 40 ejemplares. Los pescadores consideran que se debería ampliar notablemente el cupo: "Son cientos los cormoranes que hay en la comarca y ya se están empezando a ver incluso en los cauces altos de los ríos, estamos cansados de hacer repoblaciones que al final solo sirven para dar pienso a estas aves".

Las asociaciones de Lena, Morcín, Riosa, El Maravayu (Aller) y las Asturiana de Pesca han hecho frente común para poner freno a un problema que va en aumento: "Esta vez ya no nos importan los ecologistas ni nada, la situación es límite y los cormoranes están esquilmando los ríos, acabando con la fauna autóctona y con una actividad, como la pesca, que genera actividad económica y ayuda al ecosistema", señaló ayer el delegado territorial de la Asturiana de Pesca, Ignacio Fernández.

Los pescadores tienen una petición concreta y clara. Pretenden que el Principado autorice a la guardería a cazar más cormoranes. Este año está permitido cazar cuarenta: "Es claramente insuficiente y, además, hay que adelantar las cacerías al mes de septiembre para que los cormoranes no acaben con toda la población de truchas". Hasta ahora las asociaciones habían intentado llegar a un punto de entendimiento con los ecologistas, pero a partir de ahora no habrá espacio para el entendimiento: "Estamos ante un problema de gran magnitud, ya que también se ha incrementado de una manera descontrolada el número de garzas", subrayó Ignacio Fernández. En la comarca del Caudal, puede haber actualmente unas 5.000 licencias de pesca, según las asociaciones. Los aficionados están dispuestos a declarar una guerra abierta al cormorán tras años de hostilidades: "Nada de esto tiene sentido, no es una especie autóctona, es como si aparece un tigre en el Aramo y nadie hace nada", denuncian.

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